El Gobierno continuó ayer con los anuncios de rebajas impositivas, aunque en esa ocasión fue el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, quien se ocupó de la tarea. En un acto organizado en la sede del PP en la calle Génova con la cúpula del partido y los consejeros autonómicos de hacienda "populares", Rajoy avanzó que "muy pronto, de manera inmediata, habrá una rebaja en las retenciones de los autónomos". Pero al igual que hiciera el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, el pasado viernes, tampoco entró en detalles. El Presidente también aseguró que no se subirá el IVA, ni tampoco los impuestos a la segunda vivienda, y adelantó un dato positivo: los datos de la afiliación a la Seguridad Social correspondientes al mes de junio serán positivos. Es decir, que bajó el paro. "Podremos decir que llevamos ya 10 meses seguidos de aumento de cotizantes", afirmó.

El discurso de Rajoy -que los periodistas tuvieron que seguir por televisión una vez más- ante los suyos era para reivindicar las bondades de su reforma fiscal, prometida para 2014 pero que no se aplicará hasta 2015, año de elecciones municipales, autonómicas y estatales. Durante la campaña electoral el PP prometió bajar los impuestos, e incluso ya en el Gobierno negó que los fuera a subir. Sólo unas semanas después se aprobó el mayor incremento tributario de la historia reciente del país.

"Vamos a hacer lo que siempre hemos querido hacer y no hemos podido: bajar los impuestos a los españoles", se justificó ayer el presidente del Gobierno y del PP. Y explicó por qué ahora sí puede. "Porque se está produciendo un aumento en la recaudación de las administraciones que es la que permite bajar los impuestos".

Rajoy incidió, de nuevo, en la pésima situación que se encontró el PP cuando llegó al Gobierno. "España tenía dos salidas: pedir un rescate y salir del euro, cualquier de ellas inaceptable. Por eso tomamos decisiones duras como subir los impuestos". Se refirió también a los duros recortes y ajustes, para afirmar que pese a todo se ha mantenido el núcleo de la sanidad y la educación, que siguen siendo públicas y gratuitas, y las pensiones, que ni se han reducido ni se han congelado.

El presidente del Ejecutivo ha aseguró que la reforma impositiva relajará la presión fiscal sobre todo a las rentas bajas y medias, y remarcó que contiene beneficios sociales "como nunca" se había impulsado en España.

También aseveró que estas nuevas medidas no afectarán a la consolidación fiscal y el objetivo de déficit público porque "va a aumentar la actividad", argumentó. Y es que el Gobierno confía en que se afiance la recuperación económica y eso permita ingresar más dinero en las arcas del Estado sin tener que subir el IVA ni los impuestos medioambientales, como le ha exigido Bruselas.

Rajoy remarcó que la economía ha tomado un "buen camino" y como prueba de ello adelantó que en junio volverá a crearse empleo en términos desestacionalizados. Según sus previsiones, este año será "mucho mejor" que 2013, mientras que 2015 también mejorará respecto a 2014. "Sabíamos las dificultades, pero también que con las ideas claras, determinación y coraje y con reformas estructurales íbamos a superar estos momentos difíciles", sentenció.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, defendió que el Gobierno ha hecho una reforma "para todos, para las familias, los trabajadores, emprendedores y empresas", pero sobre todo "para las rentas medias y bajas". Y subrayó que "se cumple con el compromiso de hacer una política social y fiscal de apoyo a las familias numerosas, con hijos, a las que tienen a su cargo mayores con alguna discapacidad, que incentiva a los pequeños ahorradores y favorece a las empresas, a las pymes y emprendedores". La secretaria general del aseguró que todo ello ha sido posible "gracias al esfuerzo de los ciudadanos y al liderazgo del Gobierno de Mariano Rajoy, que ha actuado con responsabilidad y que ha tenido el apoyo de su partido".

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, advirtió por su parte que la reforma fiscal conllevará "nuevos recortes sociales", ya que el Estado recaudará "menos dinero" y las clases medias serán "los grandes contribuyentes". "Si Rajoy pretende decir que ha cumplido su promesa electoral de bajar impuestos, estará faltando a la verdad, porque ha subido más de 50, especialmente el IVA, y ha introducido copagos y nuevas tasas", explicó Rubalcaba.

El líder del PSOE defendió además la propuesta socialista en la que "cada cual pague impuestos por lo que gana, lo que hereda y sobre todo lo que posee". También abogó por luchar contra el fraude para evitar que "paguen más quienes siempre han pagado". "Se trata de que paguen quienes nunca lo han hecho y quienes han pagado muy poco en relación con la riqueza que realmente poseen", dijo.

Los detalles de la rebaja fiscal aprobada el viernes por el Gobierno no se conocerán hasta mañana, cuando se "cuelgue" íntegra en la página web del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. Será entonces cuando se desvele, por ejemplo, la reducción por las rentas del trabajo y el mínimo personal, claves para conocer la rebaja real del IRPF.

Beneficiados

Más de 1,5 millones de autónomos, es decir la mitad del total del colectivo, se verán beneficiados por la rebaja "inmediata" en las retenciones profesionales, según el presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor. En declaraciones a Europa Press, el presidente de ATA explicó que la rebaja inminente en las retenciones de los trabajadores autónomos diferenciará entre un tramo generalizado del 19% y otro que oscilará entre el 15% y el 16% en función de los ingresos del trabajador por cuenta propia.