Responsables de Petróleos Mexicanos (Pemex) acudirán a Galicia dentro de quince días para refrendar su apuesta por su nueva empresa participada, el astillero vigués Hijos de J. Barreras, que ultima la firma de contratos con armadores extranjeros que trabajan para la petrolera azteca, como avanzó ayer FARO. La industria auxiliar de la comarca aguarda expectante a que se confirmen estos nuevos pedidos por el peso que Barreras que tiene en la industria naval viguesa: a pleno rendimiento, la factoría de Beiramar representa el 35% de la capacidad productiva del sector, llegando a emplear a más de 3.500 trabajadores.

Los responsables del astillero guardan silencio sobre los detalles de la operación de compra por parte de Pemex, que ha tomado el 51% del accionariado de la sociedad, y sobre las negociaciones con armadores mexicanos y extranjeros. Según la propia Pemex, estas discusiones derivarán en el inicio de la construcción de buques "en las próximas semanas". Fuentes consultadas por FARO explican que PMI, la filial de Pemex que ha tomado el control de Barreras, puede influir en los armadores que prestan sus servicios a la petrolera mexicana para que renueven en Vigo sus flotas. Las mismas fuentes apuntan a que la mayoría de estas firmas son norteamericanas y del norte de Europa.

Desde México valoran la operación por la transferencia de tecnología que reportará. La prensa azteca recoge que Pemex puede formar en Vigo a personal mexicano para la construcción, en una segunda fase, de un astillero similar a Barreras en sus costas. Sobre la operación de compra, el diario La Reforma explica que el director general de Pemex, Emilio Lozoya, tendrá que explicar al consejo del grupo "la estrategia de compras de las acciones" de Barreras en la segunda semana de diciembre.

Mientras, en Galicia tanto la patronal del metal (Asime) como la asociación de astilleros Aclunaga coincidieron ayer en que el desembarco de Pemex "mejora la imagen" del sector. El secretario general de Asime, Enrique Mallón, no descarta que tras la llegada de la petrolera mexicana otros "compradores e inversores" muestren su interés por la industria naval gallega. De igual forma, el responsable de Aclunaga, Fernando Alcalde, manifestó que espera que "los clientes también vuelvan a confiar en Galicia y se anime el sector". "Lo que tenemos es que vender la imagen de que en Galicia construimos con calidad, cada uno en su sector, pero con calidad", señaló.

Barreras está considerado el "pulmón" del naval vigués por influencia sobre la industria auxiliar. Es el astillero con mayor capacidad de la Ría, de aproximadamente del 35% del total, seguido por Factorías Vulcano (20%), Metalships, Freire y Armón (con un 10% cada uno), y Cardama (5%). Con plena actividad, Barreras puede generar más de 3.500 puestos de empleo entre trabajadores de industrias auxiliares y su propia plantilla.

Polémica

Donde sí ha generado polémica la entrada de Pemex en Barreras ha sido en el Parlamento gallego. El consejero de Economía, Francisco Conde, que estuvo presente en la firma del acuerdo, lamentó ayer que los grupos de la oposición en la Cámara gallega -PSdeG, AGE y BNG- sean "los únicos a los que no les parece bien" la adquisición del 51% del capital del astillero vigués por parte de Pemex.

Interpelado por la diputada del Bloque Carme Adán en el pleno del Parlamento un día después de que se materializase la operación, Conde les ha pedido que "escuchen de vez en cuando a los empresarios y trabajadores de este país", al asegurar que valoran esta actuación.

Por su parte, Adán criticó que la "estrategia" del Gobierno autonómico pasa, a su juicio, por "vender Galicia" e incluso "liquidarla".