La Xunta actuará como si fuera un banco más en la inyección de liquidez por 55 millones de euros a Pescanova de forma urgente. Y lo hará una vez la banca ya ha diseñado el pliego de condiciones (term sheet) del acuerdo y después de haberse negado a avalar la operación. Este rechazo propició que sea la marca y la sede de Chapela los activos que se van a hipotecar para que la pesquera reciba el crédito y no se colapse en las próximas semanas. La Xunta, en definitiva, no asumirá riesgos, prestará unos cuatro millones e ingresará algo más de 180.000 euros en intereses en una decisión que pilló de sorpresa a Banco Sabadell, Popular, NCG, Deutsche Bank, Bankia y CaixaBank. Los bancos que ya habían garantizado la inyección de liquidez a Pescanova -a los que se podrían sumar BBVA, Bankinter y Santander- supieron que la Xunta sería un prestamista más ayer al mediodía.

"Lo supimos un poquito antes de que lo comunicaran oficialmente", explicaron a FARO dede una de las entidades. "Ha sido una sorpresa", agregaron expertos del mercado. Fue el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, quien hizo el anuncio en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta. Según explicó, el Ejecutivo aportará "el 7%" del crédito exprés "en las mismas condiciones" que el resto de entidades. Esto es, deuda privilegiada (con cobro preferente) y a un tipo de interés de algo más del 4,5%, muy por encima de los préstamos que otorga el Instituto Galego de Promoción Económica (Igape).

Según fuentes próximas a la compañía, la Xunta abordó el tema directamente con la administración concursal, Deloitte, toda vez que ésta tiene desde el martes por la noche esa hoja de condiciones del préstamo. Además del interés, el plazo (un año) y la cuantía (55 millones), se incluye el activo de mayor valor de la compañía, su marca, y el más simbólico, sus instalaciones centrales.

"Es una señal de la confianza del propio pueblo gallego en esa compañía, en ese plan de viabilidad que, sin duda, puede producir efectos en los acreedores y en los bancos que tienen que garantizar el mayor importe de las necesidades de liquidez inmediata que tiene la compañía", explicó Núñez Feijóo. Deloitte todavía no ha finalizado el informe concursal y pidió a la banca, como avanzó FARO, hasta tres o cuatro meses más de plazo. "Los 55 millones son un recurso de urgencia que no está sustentado en un plan específico, sino en unas necesidades evidentes de circulante", resumen desde el entorno de la empresa.

Tras la decisión adoptada por el Gobierno gallego, que definió como un compromiso "medido, razonable y sensato", remarcó que el Gobierno autonómico seguirá "al lado" de la firma, "con la misma atención y prudencia" que hasta ahora.

En cualquier caso, preguntado sobre si podría comprometer nuevas aportaciones si precisase de más liquidez en un futuro, ha rechazado hablar de futuribles, toda vez que "no sería prudente" pronunciarse de otras cuestiones cuando el "único compromiso" sellado a día de hoy es el que anunció al término del Consello.

Recusación de BDO

Por otra parte, el juzgado de lo mercantil número 2 de Pontevedra ha denegado la solicitud de Deloitte, administrador concursal de Pescanova, de que se suspendiese por un período de 60 días la revocación de la auditora BDO, que supervisó las cuentas de la pesquera durante los últimos once años.

Cuando Pescanova acordó solicitar la entrada en concurso, también se dirigió al juzgado para pedir la revocación de BDO para la verificación de sus cuentas anuales individuales y consolidadas del ejercicio 2012. La auditora rechazó dicha revocación y defendió su labor en la pesquera gallega, además se ofreció incluso para revisar las cuentas de 2012, pero la multinacional eligió a KPMG como auditor forense.