Las veinte empresas que han dado forma a la iniciativa Vigo Ship Repair, que pretende promocionar el negocio de la reparación naval en esta Ría, prevén un volumen conjunto de facturación de unos 75 millones anuales, según cálculos de los promotores. Este proyecto, que será presentado el próximo lunes, agrupa a astilleros e industrias auxiliares, y básicamente se trata de una alianza comercial para difundir esta actividad a través de Internet, ferias y congresos. Detrás de esta plataforma, que al contrario que la sociedad Centro de Reparaciones Navales de Vigo no busca crear un gran polo de reparaciones navales en la Ría, se encuentran los consignatarios de Logidigal con el apoyo institucional del Puerto de Vigo.

Participan en Vigo Ship Repair astilleros como Metalships, Freire, Cardama y Armada, y auxiliares como Mecanasa, Toysal, Regenasa-Panelfa, Krug Naval y Montajes Cancelas, entre otras. Los impulsores del proyecto estiman una facturación anual superior a los 75 millones de euros, "cifra que tenderá a incrementarse si se tiene en cuenta que las perspectivas de tráfico marítimo indican que irá en aumento". Según los promotores, la reparación naval movió en 2010 en Europa 3.500 millones de euros, el 16% del total de la construcción naval. Estos pretenden aprovechar la situación geoestratégica de Vigo para captar carga de trabajo. Los primeros pasos para la difusión conjunta de servicios es la creación de una web (www.vigoshiprepair.com), todavía inactiva, y su presentación en la feria Breakbulk Europe, en Amberes, del 13 al 16 de mayo.

La idea de crear un verdadero centro de reparaciones navales en Vigo estuvo a punto de conseguirse hace unos años cuando 55 empresas, que habían llegado a desembolsar 11 millones de euros de capital social en la sociedad Centro de Reparaciones Navales de Vigo S.A., mantuvieron negociaciones avanzadas para la compra del astillero Metalships. Éste, por su posición resguardada dentro de la Ría, era la mejor ubicación para desarrollar esta actividad. La operación se frustró por la falta de apoyos por parte de la Xunta, entonces gobernada por el bipartito. La sociedad tenía previsto incluso adquirir un tercer dique flotante de 20.000 toneladas para reparar buques de gran eslora. En la actualidad dicho proyecto se encuentra latente, con 33 empresas inscritas (astilleros y auxiliares), a la espera de una oportunidad.