El sector pesquero, que forma parte de la postal histórica de Galicia, se la juega en Bruselas con las negociaciones para la nueva Política Pesquera Común (PPC). El sector reniega de una fórmula garantista que pone en riesgo miles de empleos. La conselleira Rosa Quintana, que participó esta semana en el Consejo de Ministros del ramo en Luxemburgo, coincide en este punto con el sector. La anterior propuesta de la PPC era prácticamente letal pero, a juicio de Quintana, esta semana se ha avanzado mucho de cara a lograr una normativa más justa.

–Se declara "relativamente satisfecha" tras la última reunión de Consejo de Ministros de Pesca en Luxemburgo. ¿Qué significa eso?.

–Hay que pensar que Galicia y nuestra flota partía de un mal principio, que fue la estabilidad relativa con la que entramos en la Unión Europea, que nunca ha obedecido una razón de relación con la dependencia real de la pesca, sino con un reparto que se hizo antes de entrar nosotros en la Unión. Estamos siempre en inferioridad de condiciones con el resto de los Estados miembros en la negociación, eso no ha cambiado. Por eso digo que estoy relativamente satisfecha. Entendemos que deberíamos ser capaces de que se modificara ya el principio de la estabilidad relativa para que nuestra flota quedara mejor, que se atendiera nuestra dependencia de la pesca y nuestra capacidad pesquera. Es una cuestión determinante pero, aún sin tocar este principio de la estabilidad relativa, las cosas que hemos conseguido en este consejo de ministros facilitan nada menos que la permanencia de nuestro sector.

–¿Qué destacaría como lo más positivo?

–Hemos conseguido flexibilizar la propuesta sobre el Rendimiento máximo sostenible, hemos conseguido flexibilizar la de los descartes y, además, la Comisión se ha comprometido a tener una ronda de trabajo con los demás Estados miembros para que España no salga perjudicada con el aspecto de los descartes. Peleamos porque esto no afecte a las cuotas que tenemos a día hoy, porque la propuesta inicial las ponía en riesgo. Con lo cual por eso digo que estoy relativamente satisfecha. La posición de partida era muy mala, la peor, pero las condiciones que tenemos hoy son mucho mejores que las que teníamos en enero.

–¿Entonces, objetivo cumplido?

–Queda mucho trabajo por hacer, la propuesta aún debe ser ratificada. Nos toca seguir trabajando con los eurodiputados porque, como sabe, en esto tiene que estar de acuerdo el Consejo y el Parlamento, tenemos que seguir trabajando a nivel parlamentario para mejorar nuestra posición en el texto final.

–Dentro de la Comisión hay países de todo tipo, con diferentes sensibilidades y, sobre todo, cuotas. ¿Con qué aliado podemos contar en Galicia para que no se pongan trabas?

–No tenemos aliados en el Consejo en materia de pesca, desgraciadamente. De todos los Estados miembros€ sí, todos quieren respetar los principios de estabilidad relativa. Pero bueno, la Comisión es sensible a nuestro problema y entiende que tenemos una capacidad pesquera y que ésta debe tener su actividad. Por tanto, el compromiso de la presidencia, que es de Dinamarca, y el de la Comisión nos ayuda algo.

–¿Entonces existe margen objetivo para mejorar la propuesta de la Política Pesquera Común?.

–Sí, sí lo hay.

–¿En qué aspecto, propuesta...?

–Pues en casi todo hay margen. Mire, en que podamos conseguir más cuotas, por ejemplo, ahí hay margen. También en que los descartes vayan especie por especie, pesquería por pesquería o que se permita que el 5% de las especies no tengamos que descartarlas ya que puede suponer problemas técnicos... Yo creo que vamos bien, la verdad.

–La Comisión aplica un recorte en las cuotas para alcanzar el rendimiento máximo sostenible, que ahora se retrasa. Pero la mitad de los stocks no se conocen, no se han analizado. Aún con el retraso en la entrada en vigor del RMS, ¿tiene sentido tomar esta medida e incluirla en la PPC?

–No, claro. Por eso una de las propuestas que se ha hecho desde Galicia y ahora también desde el Estado es la de mejorar los estudios científicos sobre la situación real de los stocks. Cuando nos decían que querían aplicar el rendimiento máximo sostenible ya en 2015€ ¡Eso era imposible! Ni tenemos suficientes datos científicos para saber cómo están las diferentes poblaciones. No se puede determinar cuál es el rendimiento máximo sostenible sin datos, está claro. Por eso es bueno que hayamos conseguido flexibilizar los plazos.

–¿La propuesta inicial habría supuesto la muerte del sector? O, no ya la desaparición tal y como lo conocemos, pero, ¿un severo daño a nuestra flota?

–Sí, estoy de acuerdo. Tal y como estaba redactada la propuesta sí, era una amenaza seria para todo nuestro sector.

–¿Comparte la cifra del sector de la desaparición de unos 6.000 empleos solo a bordo?

–Es que la propuesta inicial llevaría a la desaparición al sector pesquero gallego. Sin tener buenos datos científicos, con los TACs y cuotas que tenemos hoy, con la aplicación de los descartes de manera inmediata para todas las especies desde un inicio€ eso iba a ser un golpe muy duro para el sector.

–Imagine que puede cambiar lo que quiera de la propuesta. Puede ser muy ambiciosa...

–Si nos vamos a la utopía yo empezaría por modificar la estabilidad relativa, ¿verdad? Pero, en fin, eso de momento es tarea complicada.

–¿Y yendo a lo más asequible?

–Tal y como está hecha la reforma, y aún siendo un documento base, a mi me gusta. Ahora es cuestión de matizar los plazos porque no hay acuerdo de años cerrados.

"Cuando entramos en la UE nos dieron un 4% de la capacidad pesquera. Tenemos siempre la misma lucha"

–¿Cómo se ha logrado incluir el aspecto social en un escenario tan encorsetado por el principio de estabilidad relativa?

–Nos ayudó mucho el año pasado cuando tuvimos el problema del lirio o la bacaladilla, por ejemplo. Ahora la Comisión entiende que deben quedar al mismo nivel los aspectos sociales y los económicos, junto con los científicos. En general, creo que la sensibilidad del sector pesquero gallego quedó bien recogida. Es la primera vez que en una propuesta de la Política Pesquera se incluye el aspecto social y el económico, que es algo que Galicia venía demandando desde el año 2009.

–El impacto social de las medidas de la Comisión es una reivindicación contínua del sector. Han pedido que se tenga en cuenta la incidencia de la pesca y de las medidas pesqueras en la población, en las ciudades... Pero vemos cómo otros países con menos tradición pesquera tienen más cuota y su parte social está más resguardada. Es difícil de entender.

–Por eso le decía que arrastramos un problema grave desde siempre, desde la entrada de España en la Unión Europea. Cuando se negoció la entrada en la comunidad económica nos dieron un 4% de la capacidad de pesca que había en aquel momento, hasta hoy. Claro, por eso en cada reunión de Consejo de Ministros de diciembre, cuando se reparten los TACs y cuotas para el año siguiente, tenemos la misma lucha, salimos con las fuerzas muy justas. Tenemos poca capacidad de reparto.

–¿Hay diferencias entre que sea Arias Cañete ministro a los anteriores, del anterior Ejecutivo?.

–Pues sí, sí que aprecio diferencias. Es un ministro que conoce muy bien las instituciones comunitarias, y que domina el tema.