El difícil escenario económico que atraviesan tanto el mercado español como el comunitario hace que las exportaciones a los mercados internacionales cobran cada vez más importancia para garantizar el futuro del sector conservero español, en un 80% asentado en Galicia. A falta de concreción de las cifras del comportamiento del mercado español, los datos del pasado año elaborados por la patronal conservera Anfaco Cecopesca y a los que ha tenido acceso este diario muestran que los mercados internacionales han permitido al sector sortear el ejercicio con un "apreciable incremento" de las exportaciones.

En concreto y según los datos de Anfaco, las exportaciones del sector conservero aumentaron el pasado año 2011 con respecto al anterior un 7% en volumen, hasta alcanzar las 140.013 toneladas, y un 16% en valor económico, lo que se traduce en una facturación de más de 595 millones de euros.

En el detalle de los datos –entre enero y noviembre, los últimos disponibles– se constata que las conservas de atún siguen siendo las que generan mayor volumen de exportación a la industria transformadora española, hasta casi rozar las 90.000 toneladas, con un incremento del valor del 22,38% –389,1 millones de euros– y una subida del precio medio de casi el 10%, es decir, de 3,97 euros por kilo en el año 2010 se pasó a 4,34 euros por kilo en el pasado ejercicio.

Las especies que registraron mayor incremento de ventas en los mercados internacionales fueron mejillón –el volumen de las exportaciones subió respecto a 2010 casi un 29%–, moluscos (18,74%) y atún (11,81%). El surimi también registró un fuerte incremento (34,3%) y la salazón de anchoas (60,1%).

En el caso contrario se encuentran las conservas de sardina, que bajaron un 21,82% o la caballa, con una apreciable reducción cercana al 50%.

El mercado europeo sigue siendo el principal destino de las conservas de pescados y mariscos españolas y ha aumentado su demanda. Así, las ventas al mercado comunitario mejoraron un 9,15% en volumen y casi un 18% en valor, lo que se traduce en 121.007 toneladas y 503 millones. Los países europeos no comunitarios también aumentaron sus compras y, en concreto, un 14,45% en volumen (cerca de 4.000 toneladas) y un 13,9% en valor (17 millones). Mientras, el mercado asiático mejoró cerca de un 40% tanto en volumen como en facturación y América redujo sus compras pero permitió mejorar la facturación un 8,2%.