La propuesta de la canciller alemana, Ángela Merkel, de armonizar las vacaciones y la edad de jubilación en Europa, cargando las tintas contra España, Portugal y Grecia por disfrutar, según la germana, de unas mejores condiciones que en otros países es matizada por abogados laboralistas y rechazada por trabajadores gallegos.

El abogado laboralista vigués Álvaro Hinrichs califica la propuesta de la Merkel como "acertada" y argumenta que "la tendencia debe ir porque Europa unifique su mercado laboral. Si deseamos una UE unida debe ser con todas las consecuencias". Señala que no tiene razón de ser discutir sobre quien tiene más festivos, si Alemania o España. "Lo lógico es que se homogeneicen las relaciones laborales en todos los países en busca de las mejores soluciones", apunta. Hinrichs considera que todo está inventado y lo único que hace falta "es mirarse en el espejo de los países que lo están haciendo bien, en los que menos paro tienen, más empleo generan, son más productivos y tienen menos absentismo, como es el caso de Dinamarca".

Ángela Merkel atacó en su intervención a la Europa meridional en un acto interno de su partido, la coalición democristiana CDU, que sufre en su país el desgaste de las críticas por los rescates en Europa: "No se trata sólo de no incurrir en más deudas, sino que también es importante que en países como Grecia, España o Portugal los trabajadores no se puedan jubilar antes que en Alemania". Y por si no fuera suficiente, añadió: "A pesar de que los países comparten una moneda común, unos disfrutan de muchas vacaciones y otros de muy pocas. A la larga esto no funciona". Merkel debió olvidar que las encuestas oficiales no respaldan sus críticas. Los españoles trabajan más horas y cobran menos que los alemanes, el retiro real es más tardío y en teoría los españoles tienen seis días más festivos al año que los alemanes, pero el alcance real varía según los convenios. Así que las diferencias entre ambos países son escasas en estos apartados.

Productividad

El presidente del Círculo de Empresarios de Galicia, Marcelino Otero, señala que el comentario de la canciller alemana hay que considerarlo dentro de su contexto: "los alemanes son muy trabajadores y muy productivos, mientras que los españoles somos muy trabajadores pero menos productivos". Señala que Alemania debe ser un ejemplo para España porque su tasa de paro es inferior a dos dígitos, mientras que aquí se supera el 20%. "Lo que ha dicho por tanto Merkel son indicaciones que no tenemos que tomarlas a broma, aunque como español siempre molesta que nos diga un extranjero lo que tengamos que hacer".

Marcelino Otero señala que no solo es necesario armonizar el mercado laboral, sino otros aspectos como los tributarios y los legislativos a todos los niveles. Coincide con Hinrichs en que lo que hay que hacer es copiar lo que hacen los países que están arriba como Alemania o Austria, en temas como el coste de los despidos o las pensiones.

El abogado vigués Rafael Tena cree que la propuesta de Merkel "es razonable, pero muy complicada de llevar a la práctica porque son derechos adquiridos muy consolidados en nuestro sistema de relaciones laborales, leyes y convenios colectivos". Tena recuerda que los trabajadores españoles cuentan con 36 días libres al año (22 días laborables de vacaciones establecidos por ley más 14 de festivos), mientras que un empleado alemán disfruta de solo seis días libres menos (que salen de sumar los 20 de vacaciones más 10 de festivos)".. "Si estamos en un sistema europeo es lógico que sea a todos los efectos, pero también en lo que se refiere a los horarios y sueldos", añade.

Homogeneizar el mercado

Para Rafael Tena sería interesante homogeneizar el mercado, pero considera muy difícil su aplicación en las empresas porque no puede haber unos trabajadores regidos por unas normas laborales y otros por otras diferentes. "Sería un caos", asegura. Y añade que en número de horas se trabaja más en España que en la mayoría de países europeos, pero que el problema es de productividad. "Es lo que hay que mejorar. No creo que sea una cuestión de horarios ni de vacaciones", afirma.

En la calle las opiniones son diferentes. Merkel no cae simpática "porque por su trabajo, que solo consiste en reuniones, cobra millones". Manuel Vila, montador de neumáticos, afirma que "tengo un mes de vacaciones, pero que solo puedo coger 15 días por las necesidades de la empresa. No trabajo tanto porque tenga miedo a que me despidan, sino que es una necesidad de la empresa y he llegado a un acuerdo con el jefe". Únicamente ha cogido más días libres con motivo del nacimiento de su hija.

Por su parte, Marcos Lema, empleado de Carrefour señala que trabaja lo suficiente, 30 horas a la semana, "de otra manera no podría mantener una vida social y familiar adecuada. La productividad depende de las horas que se trabajan y, consecuentemente, con el salario que se perciba".

El parado

Jorge Estévez está en paro y considera que Ángela Merkel "con el dinero que tiene no tiene argumentos para decir que los españoles tenemos muchas vacaciones". Este parado trabaja eventualmente como camarero en las fiestas de pueblos y parroquias, desde la mañana a la noche. "Este fin de semana, de viernes a lunes incluido, solo pude dormir una hora al día. No conozco las vacaciones, solo las obligadas cuando se acaban las fiestas. Cuando estoy en paro".