Los pescadores de bajura de toda Galicia van a ser "tanteados" en las próximas semanas por los responsables de sus cofradías sobre la posibilidad de realizar el próximo mes de abril algún tipo de movilización contra lo que entienden como situación "insostenible" para el sector. Entre los principales motivos de enojo están crecientes recortes de cupos pesqueros y cierres de pesquerías –caballa, merluza o bacaladilla– mientras "el mar está lleno de peces que no podemos pescar".

Así lo aseguró ayer el presidente de la Federación Galega de Confrarías de Pescadores, Benito González, tras la reunión celebrada en Santiago por los patrones y vicepatrones mayores de los pósitos gallegos para valorar la situación que atraviesa el sector y estudiar las medidas a adoptar para defender sus intereses "en el corto y largo plazo".

González avanzó que "al margen de los contactos institucionales y las acciones que se decidan con el resto de los afectados, como el arrastre o los transformadores y los frigoristas para hacer causa común e ir a presionar a donde haga falta", en el corto plazo "hay que ir calentando motores porque las cosas están muy difíciles y no parece que vayan a cambiar".

Entre las ideas que ayer barajaron los directivos de las cofradías está solicitar incluso una entrevista con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero o buscar la mediación del titular del ejecutivo autonómico, Alberto Núñez Feijóo, para trasladar la realidad de un sector que ve muy comprometido su futuro con toda "esta política pesquera, que parece una tomadura de pelo". Además, mostraron su malestar por la actuación de algunos inspectores de la Xunta que "en ciertos muelles nos tratan como delincuentes por un simple kilo o una caja de pescado que no podemos ni usar para carnaza; tenemos enemigos por todas partes y no solo los europeos y por eso pedimos un poco de colaboración, que lo único que estamos haciendo es pescar y no esquilmamos ninguna pesquería".