El principal indicador de la bolsa española, el Ibex-35, ganó 1,20 puntos, hasta 8.321,10 unidades, en tanto que el Índice General de la Bolsa de Madrid perdió 0,01 puntos, hasta 874,01 unidades.

En Europa, con el euro a 1,33 dólares, todas las plazas principales cayeron: París bajó el 0,98 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 0,87 por ciento; Fráncfort, el 0,80 por ciento; Milán, el 1,24 por ciento; y Londres, el 0,90 por ciento.

La Bolsa española comenzaba la sesión con optimismo, animada, al igual que el resto de mercados europeos, por la conclusión de la reunión del G-20 celebrada en Londres, tendencia que mantendría hasta poco tiempo antes de la apertura del mercado estadounidense.

El selectivo Ibex-35 llegaba incluso a superar los 8.500 puntos a media sesión, a pesar de unos datos macroeconómicos negativos en la zona euro, ya que los precios de la producción industrial bajaron en febrero un 0,5 por ciento, mientras que las ventas del comercio minorista cayeron el 0,6 por ciento, más de lo que esperaba el mercado.

Las pérdidas de los futuros estadounidenses, confirmadas posteriormente con la apertura a la baja de Wall Street, pusieron fin al buen humor y el mercado español se dio la vuelta para entrar en un terreno negativo, que no abandonaría hasta minutos antes del cierre.

A la espera de que las empresas comiencen a dar sus nuevos resultados trimestrales, la retirada de la oferta de compra que planteó IBM a la empresa de tecnología Sun Microsystems acabó por presionar a la baja a todos los mercados, a excepción del español, que contracorriente logró escapar de las pérdidas gracias al cambio de signo de casi todos los grandes valores en los últimos minutos.

Así, todos los pesos pesados del selectivo, a excepción del Banco Santander, que cayó el 0,68 por ciento, subieron o se mantuvieron: Telefónica repuntó el 0,20 por ciento y Repsol YPF el 0,07 por ciento, mientras que BBVA e Iberdrola repitieron cotización.

Abengoa lideró el verde del Ibex con una subida del 5,80 por ciento, seguido de Telecinco, que repuntó el 5,02 por ciento; y de Banesto, con un alza del 4,16 por ciento.

En el lado contrario, Gamesa encabezó las pérdidas del selectivo con un retroceso del 4,58 por ciento, seguido de Iberia, que cayó el 1,80 por ciento y de Inditex, con un descenso del 1,71 por ciento.

En el mercado continuo destacó la subida del 11,45 por ciento de Sol Meliá y del 11,27 por ciento de Azcoyen, en tanto que Ercros y Almirall comandaron las pérdidas con descensos del 7,14 y del 6,08 por ciento, respectivamente.

La rentabilidad de la deuda española a largo plazo caía siete centésimas, hasta el 4,077 por ciento; mientras que el efectivo negociado en el mercado continuo ascendía a 3.144,2 millones, de los que algo más de 577 correspondieron a Santander y 406 a Telefónica.