El fantasma de la quiebra planea ahora más que nunca sobre la aerolínea de bandera italiana, que arrastra una deuda de casi 1.300 millones de euros y que el Gobierno quiere privatizar desde hace más de un año sin lograrlo.

Air France-KLM dio anoche por cerradas las negociaciones con ocho de los sindicatos representados en Alitalia, con los que quería lograr un acuerdo marco sobre su propuesta de compra, después de que estos le presentaran una contra-propuesta que consideró no realizable.

La reacción del presidente y consejero delegado del grupo italiano, Maurizio Prato, fue inmediata y poco después presentó su dimisión.

El consejo de administración se reunirá hoy y no se descarta que presente su dimisión en bloque, mientras es posible que se convoque un Consejo de Ministros de urgencia para estudiar la delicada situación.

Todo ello se produce además a diez días de las elecciones generales que se celebrarán en Italia el 13 y 14 próximos, y en cuya campaña electoral la privatización de Alitalia ha ocupado mucho espacio.

Ahora, uno de los horizontes es que Alitalia pase bajo administración especial y otra es esperar a ver si se materializa el prometido grupo de empresarios italianos dispuestos a comprarla, del que durante estos días ha hablado con insistencia el líder del conservador Pueblo de la Libertad (PDL), Silvio Berlusconi.

El diario económico Il Sole 24 Ore, que destaca el "riesgo de insolvencia de la compañía", considera que puede excluirse que el consejo de administración de Alitalia pida hoy a los tribunales el nombramiento de un administrador extraordinario.

El ministro en funciones de Economía, Tommaso Padoa Schioppa, habló precisamente ayer ante varias comisiones de la Cámara de Diputados sobre la hipótesis de la administración especial si las negociaciones con los franco-holandeses no se materializaban.

En el caso de nombrar un administrador especial, el ministro advirtió de que se producirían "iniciativas de reestructuración inmediatas" y hay "motivos fundados" para considerar que serían "bastante más radicales que las propuestas" por de Air France-KLM.

El ministro recordó a los parlamentarios que la oferta de los franceses era la única sobre la mesa y que no veía otra alternativa.

Sin embargo, según el candidato a presidente del gobierno por el PDL sí que existiría, bajo la forma de un grupo de empresarios italianos dispuestos a sacar de Alitalia de atolladero, pero del que aún no se conoce ningún nombre.

Berlusconi, de siempre opuesto a la opción Air France-KLM, aseguró hoy en una entrevista con el diario Libero que el interés de los empresarios nacionales es "realmente alto".

Mientras, los sindicatos de Alitalia pidieron hoy una entrevista "urgente" con el Ejecutivo, a la luz de los nuevos acontecimientos, para evaluar la situación de la empresa.

El presidente del Gobierno en funciones, Romano Prodi, que participa en Bucarest en la cumbre de la OTAN, señaló anoche, citado por medios locales, que romper las negociaciones había sido "un gran error", porque había una perspectiva "seria y concreta".

Además, consideró que los sindicatos tienen que "asumir su responsabilidad" por lo sucedido.

Las acciones de Alitalia están sujetas a una fuerte volatilidad desde hace semanas y en los últimos días han sufrido constantes suspensiones en la Bolsa de Milán, tanto por exceso de alza como de pérdidas.

La cotización ha sido suspendida hoy durante todo el día a la espera de un comunicado de la compañía tras el consejo de administración.