La internacional Iria Saeta se convirtió en el tan ansiado refuerzo que estaba reclamando el Poio Pescamar para poder aspirar a la lucha por uno de los títulos nacionales. La jugadora abandona el Cidade As Burgas, de Ourense, después de diez temporadas ante la suculenta oferta que le hizo llegar la directiva que preside Juanjo García.

La jugadora que actúa en las posiciones de ala-pivot reconocía ayer que "falta que el club lo anuncie oficialmente, pero la próxima temporada jugaré en el Poio". Señala que "me hicieron una oferta que era irrechazable y no podía dejar pasar la ocasión".

Iria Saeta, que fue internacional cerca de una treintena de ocasiones, afirma que "he recibido ofertas de varios clubes de Primera División y me decidí por la del Poio porque es una buena oferta, pero además me permite estar cerca de casa, que era que me interesa mucho".

Destaca que "conozco a la mayoría de la jugadoras del Poio, pues con algunas he coincidido en alguna selección y tenemos buena relación, por lo que me será muy fácil adaptarme al nuevo equipo".

La jugadora ourensana se erigió en la máxima goleadora de Primera División Femenina en las dos últimas temporadas con el Cidade de Ourense y está considerada como una de las mejores a nivel nacional.

Las que no continuarán en el conjunto rojillo la próxima temporada serán la colombiana Jessy Motado, y Suki, que apuestan por diferente proyectos deportivos, mientras que el club sigue negociando la continuidad de jugadores que son importantes en el esquema de Marcio Santos como la portera Silvia Aguete, Ceci, Ale de Paz o Jessy Lores.