Ya es momento para los derbis en el club granate. Tras solo haberse enfrentado por lo de ahora a Celta B y Rácing de Ferrol, equipos que a priori estaban llamados a ser los referentes en Galicia en este grupo de Segunda B, el Pontevedra se mide en próximas fechas los otros tres conjuntos gallegos del grupo de forma consecutiva; Somozas, Coruxo y Boiro.
Esta campaña, y después de salir con un bagaje más que satisfactorio del tramo más complejo del calendario, el Pontevedra vuelve a repetir tal y como ocurrió hace un año el periplo de tres partidos consecutivos ante rivales de la zona. En aquella ocasión a los pontevedreses les resultó imposible conseguir el pleno de victorias, sacando un máximo de cuatro puntos de nueve posibles en la primera vuelta y 3 en la segunda.
Ahora los enfrentamientos se presentan como algo más benévolos para un Pontevedra en plena racha y con dos de sus choques de rivalidad en Pasarón, donde lo han ganado todos hasta ahora contra Somozas (penúltimo clasificado) y Boiro (décimo segundo). Dos victorias supondrían dejar atrás el récord histórico de 1981 de ocho victorias consecutivas en un arranque liguero en casa.
La temporada pasada los granates se dejaron más de la mitad de los puntos ante los equipos vecinos haciéndose solamente con 12 de los 30 posibles. Ferrolanos y celestes consiguieron vencer en los dos enfrentamientos, mientras que del Compostela los de Luisito únicamente arrancaron un empate sin goles en casa. Por el lado positivo, el Coruxo fue el equipo gallego que mejor se le dio a los lerezanos luego de llevarse los seis puntos puestos en juego.
Superado este periplo de derbis al Pontevedra le quedará únicamente dos partidos para cerrar la primera vuelta ante la Arandina y el Caudal. La segunda parte de la temporada arrancará ya a partir del año próximo, tras el parón navideño. El último esfuerzo del 2016 para los pupilos de Luisito será sobre el papel de menor dificultad tras haberse medido ya a todos los equipos llamados a acabar entre las seis primeras posiciones. El encuentro de O Vao ante el Coruxo es probablemente el que entraña mayor dificultad para el bloque de Pasarón debido a la buena trayectoria de los vigueses y a las dificultades que están encontrando cada vez que juegan fuera de casa.
Cabe decir que en la temporada pasada a estas alturas de la liga, el Pontevedra se alojaba por primera vez en el año del retorno a la categoría de bronce en puestos que dan derecho a disputar la fase de ascenso a Segunda División, concretamente en la misma cuarta posición que ahora ocupa pero con tres puntos menos. La dificultad en cuanto a números del Grupo I de Segunda B hace que todo esté un peldaño más caro con respecto al curso pasado.
Reencuentros
Los derbis entre vecinos tendrán también un componente especial para muchos jugadores que se enfrentarán a viejos compañeros. Este mismo fin de semana serán tres los protagonistas que sentirán la "morriña" de medirse a su ex equipo. Por el lado granate los delanteros David Añón y Mario Barco, quienes después de ser las referencias anotadoras en la ferrolterra decidieron ir hacia el Sur para exportar sus goles al equipo granate. Uno de los encargados de frenar sus acometidas será el central Pablo González, pieza del entramado defensivo que el curso pasado tenía Luisito bajo sus órdenes en Pontevedra y que ahora tiene en As Somozas la continuidad y los minutos con los que no pudo disfrutar en Pasarón tras el ascenso a Segunda B.
Una semana después, los reencuentros serán con el Coruxo y con protagonistas también por las dos partes. Adrián Mouriño y Álex Fernández son los componentes de la actual plantilla pontevedresa que tienen pasado en O Vao mientras que por los verdes son hasta cuatro los futbolistas con vinculación lerezana además de la del entrenador Rafa Sáez. El más destacado es sin duda uno de los baluartes defensivos de Luisito durante las últimas dos campañas, el central Alberto Campillo. Pero junto a él también pelean por un puesto en el equipo de Sáez tres canteranos de la fábrica pontevedresa como son los delanteros Quique Cubas, Hugo Sanmartín y el argentino Pibe.
Menos nostalgia habrá en el tercer y último encuentro que cerrará el ciclo de derbis gallegos pues solo los granates David Añón y Gonzalo tienen vinculación con ambas escuadras.
