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Los granates aprenden a ganar sufriendo

El Pontevedra remontó un marcador adverso por primera vez en esta temporada - Los de Luisito son el único equipo que ha sido capaz de ganar en las últimas tres jornadas y ya ven cerca los puestos de play off

Jandrín, seguido de Álex Fernández, conduce la pelota durante un entrenamiento en Príncipe Felipe. // Gustavo Santos

El Pontevedra se está haciendo a la categoría y ha dejado atrás sus problemas de falta de gol y de remontar los partidos. Ya se está convirtiendo en un equipo fiable y tras sus tres victorias consecutivas ya es octava y está a dos puntos del play off de ascenso.

Los granates han demostrado el domingo que son capaces de darle la vuelta a un resultado, algo que no hacían desde el pasado 12 de abril cuando remontaron con una falta de Carnero en el minuto 89 un partido que empezaron perdiendo en A Lomba ante el Arosa.

La escuadra de Pasarón ha dado carpetazo en tres semanas a todos y cada uno de los gafes de la temporada. Ante el Coruxo pusieron fin a sus problemas con el gol con tres tantos, una semana después resolvieron en el inmejorable escenario del Sardinero el divorcio con las victorias como visitante. Y la contienda de ayer sirvió para aprobar con nota la última asignatura pendiente, la remontada. El balance de un mes de octubre para el recuerdo no puede ser mejor, siete goles a favor dividido entre cinco jugadores por tres en contra, por lo que para rizar el rizo, al Pontevedra solo le queda volver a conseguir dejar su portería a cero, algo que han conseguido ya dos veces desde que empezó la liga, ambas en casa.

El de ayer fue un claro ejemplo de que el equipo está en una clara línea ascendente, al remontar un choque después de una mala primera parte en la que el propio Luisito reconoció que "los primeros 25 minutos fueron posiblemente los peores que hicimos aquí en Pasarón". El momento en el que llegaban los lerezanos a este encuentro también es un factor a tener en cuenta en esta sufrida victoria, pues la confianza y la tranquilidad que el equipo tenía después de sus dos últimas victorias, ayudó a que los jugadores mantuvieran la calma para tratar de sacar el partido adelante.

La influencia del Mouriño

El otro factor de la remontada tuvo nombre y apellidos: Adrián Mouriño. El mediapunta se echó el equipo a la espaldas y con un tremendo gol desde fuera del área (pudo asistir a Borjas en banda, pero decidió tomar la responsabilidad con el disparo) desatascó un encuentro que está comenzando a coger tintes trágicos.

El centrocampista volvió a acabar el partido por segundo partido consecutivo después de tres jornadas seguidas en las que fue sustituido por su entrenador y continúa demostrando que es uno de los referentes de la plantilla granate, influyendo aun más en el juego si cabe que la temporada pasada.

El jugador quiso destacar la fé que su equipo ha tenido en los últimos partidos y sobre todo en el último para "no dejar de intentarlo hasta el final". Además añadió que "cuando no marcábamos los goles se nos achacaba que nos faltaba pegada y que el equipo no funcionaba, nosotros pedimos tranquilidad y ahora tampoco hay que entrar en un estado de euforia por haber ganado tres partidos o porque estemos marcando goles. Creo que tenemos que ir paso a paso y con humildad, y tomando los partidos con mucha calma y trabajo para seguir así".

En el apartado negativo, el centrocampista vio el domingo la cuarta tarjeta amarilla de la temporada, por lo que está a una sola amonestación de ver una quinta tarjeta que le haga cumplir ciclo, lo que le obligaría a perderse su primer partido de la temporada después de haber sido titular en todos los choques.

Es el jugador granate más amonestado por los colegiados seguido de Campillo, Álex Fernández y Borjas, que han visto la tarjeta amarilla en tres ocasiones.

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