El Ciudad Real se impuso en el duelo contra el Cisne a base de oficio, en el que fue el regreso del pontevedrés Andrés Sánchez a la pista del CGTD, pasando de héroe del ascenso a verdugo de los de Edín Covelo.

Los locales salieron con mucho ritmo, dispuestos a controlar un partido, que solo se les fue en los últimos cinco minutos de la primera parte, con un vendaval por parte del equipo rival. Tras la reanudación, el Cisne recortó distancias, pero el Ciudad Real, apoyado en Romero Fernández, Vidal y el propio Andrés Sánchez tomaron otra vez la delantera del encuentro, consiguiendo ampliar el margen de ventaja hasta los cuatro goles como máxima gracias al poderío físico y ofensivo de los visitantes.