El Teucro no pudo dar la sorpresa al caer derrotado ante el Ángel Ximénez Puente Genil (28-31) en el encuentro jugado ayer en el Pabellón Municipal por lo que serán los andaluces los que pasen a la siguiente ronda de la Copa del Rey. Durante la primera mitad, el partido estuvo muy igualado como refleja el electrónica, con mínima ventaja para los visitantes (14-15).

En ese período, los teucristas estuvieron a buen nivel y merecieron un mejor resultado. A falta de poco más de dos minutos para llegar el descanso había empate (13-13), pero además el Puente Genil se quedó en inferioridad numérica tras una exclusión de Chispi, el máximo goleador del encuentro.

Los locales no la supieron aprovechar, todo lo contrario, ya que cometieron dos graves errores que le impidieron ponerse por delante tras cometer una falta en ataque. Primero marcó Cuenca y tras una de las muchas pérdidas de balón, el meta Álvaro de Hita acertó a marcar desde su portería al ver al meta local adelantado.

Tiempo muerto de Quique Domínguez para preparar el último ataque y Adrián Pumar consigue acortar la diferencia con un excelente tanto desde el extremo.

Nada más reanudarse la segunda mitad, el visitante Medina, que acababa de salir a la pista comete una falta y es excluido por dos minutos. De nuevo el Teucro tenía la oportunidad de empatar y situarse por delante, pero sin embargo, con uno menos fueron los andaluces los que se fueron en el marcador de cinco goles.

A partir de ahí, la diferencia siempre estuvo entre los tres o cuatro tantos favorables a los visitantes. El técnico visitante evitó hacer los menos cambios posibles para aprovechar la corpulencia de jugadores como Rafa Baena, Miguel Ángel Olea, ambos en la posición de pivot, y Chispi que se encargaba de materializar los goles desde los nueve metros con unos lanzamientos muy potentes.

El Teucro perdió la calma y eso le pasó factura con constantes pérdidas de balón. Domínguez realizó los oportunos cambios, pero estos tampoco dieron el resultado apetecido, por lo que el marcador pasó a ser de siete goles de ventaja para los de Puente Genil (23-30). En los últimos cinco minutos, el cuadro pontevedrés maquilló el resultado con un parcial de 4-0 gracias a las buenas intervenciones de Iago Gómez que había sustituido a Ricardo Amérigo, aunque solo sirvió para perder de tres tantos.