La plantilla del Pontevedra está convencida de ganar los tres encuentros que faltan para la finalización del campeonato, tras sumar doce jornadas consecutivas sin perder, y para ello echan la vista atrás a la excelente trayectoria de la segunda vuelta, pero sin duda, su aval más importante es haber perdido un solo encuentro ante los cuatro rivales que le superan en la clasificación.

Los granates solo perdieron un partido en A Malata frente al Racing de Ferrol, el líder indiscutible de la categoría, pero el resto de los candidatos a jugar la fase de ascenso no fueron capaces de ganarle ningún encuentro. Solo les falta jugar ante el Deportivo B en la última jornada en Abegondo, ya que en Pasarón hubo reparto de puntos. Por su parte, el Celta B se tuvo que contentar con un empate en los dos derbis jugados esta temporada.

Recordaba ayer Milo Abelleira, que "en la pasada temporada ya nos dieron por muertos antes de tiempo, y al final ganamos en las tres últimas jornadas y fuimos los que jugamos la fase. Todos estamos convencidos de poder volver a repetir la historia y de que puede haber sorpresas que no favorezcan para poder lograr el objetivo y darle una satisfacción a nuestros aficionados".

Todo el mundo es consciente de que el encuentro del próximo domingo en San Pedro será a vida o muerte, pues el Villalonga se está jugando la permanencia. En relación a lo que supone jugar contra un rival en estas difíciles circunstancias tras no alcanzar buenos resultados ante este tipo de equipos, el técnico granate señala que "no podemos pensar en lo que sucedió durante la liga con equipos de la zona baja de la clasificación. Tenemos potencial más que suficiente para vencer a cualquiera de la categoría y los números están a la vista. El Racing de Ferrol fue el único que nos hizo pasar vergüenza, porque en Barbadás perdimos bien, pero no dimos la talla, ya que realizamos el peor encuentro de toda la liga y aunque jugásemos tres partidos seguidos no marcaríamos un gol".

La plantilla está confiada en que tanto el Deportivo B como el Compostela tendrán que sufrir mucho, sobre todo los santiagueses que tienen que enfrentarse al Órdenes y As Pontes.