La plantilla unionista se ejercitó ayer en Miraflores para recuperar el esfuerzo del pasado domingo en Baiona. El central Diego Vieytes fue uno de los que pasó por las manos del fisioterapeuta. "La verdad es que el día del Mondariz acabé con molestias y pedí el cambio -recuerda el central unionista-. Este domingo también me molestaba en la zona del abductor, pero son partidos en los que tienes que arriesgar un poco. Con todo lo que nos jugamos, aunque tengas molestias, hay que jugar o jugar".
En el plano físico aparecen las lógicas grietas de mayo y mentalmente el equipo está robusto. Vieytes, que se curtió en las eliminatorias de la fase de ascenso que jugó la pasada temporada con el Rápido de Bouzas, reconoce que preferiría un desenlace menos agónico en la pelea por el salto a Tercera con la UD Ourense. "El año pasado éramos la sorpresa y nadie confiaba en nosotros, pero ahora tenemos el papel de favoritos para ascender. Si nos lo tenemos que jugar en la última jornada, nerviosismo no habrá, pero casi es preferible materializar el ascenso antes para que no hay sustos y no pasen cosas imprevistas o aisladas que no estén en nuestra mano y que nos puedan fastidiar el ascenso", asegura.
