El Club Voleibol San Martiño obtuvo un pleno de victorias en los siete partidos que disputó en las diferentes categorías. En Tercera zonal infantil, el Escola IES As Lagoas jugó un partido vibrante contra CVO Espacio Xove que se decantó por 3-2, con parciales 25-22, 20-25, 12-25, 25-19 y 15-8.

A primera hora del sábado les tocó jugar a las más pequeñas, el Guillelme Brown, que se enfrentaba al Boiro de la Segunda Autonómica infantil. En un partido con altibajos de las ourensanas, sus rivales se lo fueron poniendo cada vez más difícil, aunque se lo llevaron finalmente las locales por 3-2 (25-18, 25-13, 22-25, 21-25 y 15-8).

El juvenil femenino de Tercera Autonómica del IES As Lagoas se estrenó en liga con mucha ilusión ante el A Pobra de Caramiñal. Comenzaron marcando el ritmo las ourensanas, no dejando en los dos primeros sets casi nada de control al rival, aunque el tercero estuvo a punto el equipo del Barbanza de llevárselo. La capacidad de reacción propició la victoria local por 3-0 (25-5, 25-11 y 25-22). Fue la primera victoria de las ourensanas, que se ponen al frente de la tabla.

El equipo sénior de Segunda Autonómica se enfrentaba al Riveira, un equipo correoso por las defensas que hacía, pero el CV San Martiño supo llevar las riendas desde el principio con puntos intensos, no dejando casi opciones a sus rivales. El 3-0 dejó parciales de 25-15, 25-19 y 25-14. Era la primera victoria del equipo ourensano B, con la se abre un nuevo camino con posibilidades de luchar por la fase.

El equipo cadete de Segunda Autónomica del Dompa Gestión, con todas sus ganas y armas, sacó su mejor juego ganando a un rival que falló mucho. Los sets no fueron complicados (25-11, 25-15 y 25-20), por lo que el entrenador probó cosas con nuevas jugadores.

El juvenil de Segunda Autonómica del Dompa Gestión tampoco falló mucho y luchó cada balón ante el Riveira, llevando el control con autoridad: 25-16, 25-19 y 25-11.

De último le tocó jugar al equipo sénior de Primera Autonómica, que se midió al XAV Cambados, un rival complicado que todo sabía levantar, pero con un flojo ataque.

Poco a poco, las jugadoras ourensanas se fueron atreviendo a rematar y se soltaron con buenas recepciones. La colocadora estuvo más afinada y el equipo demostró mucha versatilidad para atacar. Finalmente el 3-0 dejó parciales de 25-14, 2514 y 25-20.