El Caudal y el Racing de Ferrol empataron ayer en Mieres un partido que los locales merecieron ganar con toda tranquilidad, pero la mala puntería de sus jugadores y a gran actuación de Mackay lo impidieron. El resultado realmente no vale a ninguno de los dos, a los caudalistas para salir de la zona de descenso y a los ferrolanos para afianzarse en la segunda posición de la tabla. Por dominio, intensidad y ocasiones el vencedor del partido debió ser el Caudal.

Los primeros envites del partido fueron para el Racing del Ferrol, que ganaba todos los balones divididos. Hubo que esperar hasta el minuto 8 para que los locales lanzaran a puerta ferrolana por primera vez. Y el gol que estaba mereciendo el Caudal llegó por fin en el minuto 20 de partido cuando Antonio Rojas, aprovechó uno de los varios rechaces en el interior del área de Mackay y con un zurdazo establece el 1-0.

La segunda parte comenzó con una gran parada de Mackay. El Racing intentaba salir adelante pero las contras mierenses hacían retroceder a los gallegos que no eran capaces de sacudirse el dominio y la presión de los locales.

Sin embargo en una acción sin aparente peligro, Pablo Rey es derribado por Abraham y el árbitro decreta penalti. Manu Barreiro engaña a Bielsa y pone el uno a uno en el marcador.

Al final un empate que no justifica lo ocurrido sobre el terreno de juego y que además no les sirve para mucho en sus objetivos finales de la Liga de Segunda B.