El ourensano Ángel Nieto Fernández participó como integrante de la Escudería Fansi Motorsport en la prueba de resistencia de las 24 horas de Braga, para el que rescataron del desguace un BMW 318i del año 1989. Mientras se recupera del desgaste de los preparativos y los flecos posteriores, recuerda que la prueba en sí "fue muy bonita". Destaca el compañerismo dentro del grupo y entre los equipos. "La única pega fue un accidente por culpa de unos desfasados que le metieron un viaje a otro coche", lamenta Ángel Nieto. El coche respondió a la perfección, gracias al apoyo de patrocinadores como la inmobiliaria Xardín y Aditivo X. "El aceite es bestial. El coche aguantó como un jabato y la vuelta rápida se quedó a siete décimas de la total y está hecha por un tipo que no tiene coche", explica. Solo fallaron las pastillas de freno, que se pudieron recuperar de otro coche. La experiencia les anima a nuevos retos.