El Viña Costeira de Ribadavia se proclamó ayer campeón de la Copa Diputación de balonmano un año más al imponerse 27-25 en la final disputada en O Consello al Pabellón. Los visitantes empezaron bien y se mantuvieron por delante hasta el descanso (13-15), pero los ribadavienses remontaron en la segunda parte. El entrenador del Pabellón, Zarra, atribuyó a la mayor experiencia del Viña Costeira el desenlace adverso: "Siempre pasa igual. Cuando embrutecen el partido y empiezan las protestas a los árbitros, ellos se van para arriba y nosotros nos salimos del partido".