Las plantillas de Segunda División B tenían de plazo hasta ayer para presentar ante la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) la documentación necesaria para proceder a la reclamación de las cantidades que han vencido o lo harán a fecha de 31 de mayo. En el Ourense asumen que algún jugador podría acogerse a este derecho a pesar de que, en la cena que está programada para esta noche entre el plantel y la directiva, se les hará ver que "hay tesorería" y que los atrasos quedarán saldados en cuanto se resuelva la negociación con Hacienda. En caso de que se hayan producido denuncias, el Ourense conocerá el 5 de junio el montante y deberá abonarlas antes de la reunión de la comisión mixta AFE-RFEF que se celebrará a mediados del próximo mes de junio. En caso de que el día 30 no estén resueltas, el equipo quedaría abocado al descenso administrativo. Si las denuncias corresponden a impagos del mes de junio y la entidad no las atiende, se suspenderán los servicios federativos como la tramitación de fichas. Cabe recordar que desde la pasada temporada, la Federación exige avales para competir en Segunda B a los clubes que hayan tenido resoluciones adversas de la comisión mixta en dos de las tres anteriores campañas por importes inferiores a 100.000 euros (el aval será de 125.000) o superiores (sería de 200.000 euros).