El Frigoríficos del Morrazo cayó bajo el peso de la lógica y se dejó los puntos ante un Fútbol Club Barcelona que encadenó su 79ª victoria consecutiva y volvió a demostrar su absoluta superioridad en la Liga Asobal. La escuadra que dirige Xavier Pascual, "Pasqui", no dio opción alguna y asumió el mando del partido desde los primeros minutos ante un Frigoríficos que ofreció una buena imagen e hizo un encuentro más que digno para acabar perdiendo por 22-34.

Sin Suso Soliño, David García, ni Yeray Lamariano, Pillo sacó de inicio al joven Pablo Castro para que formase el centro de su defensa 6.0 junto a Fernando Eijo. El canterano comenzó con ganas y acierto en lo que sin duda fue para él todo un clínic ante algunos de los mejores jugadores del mundo. Los cangueses aguantaron 12 minutos (4-5) con un buen Moisés en la finalización, justo hasta que los problemas ofensivos se hicieron patentes. Atrás el Cangas aguantaba, rompiendo la conexión entre la primera línea y Syprzak, pero en ataque los errores -muchos de ellos no forzados- se sucedían. El Frigoríficos se movía al borde del pasivo ante las torres blaugranas y aunque se controló el contragolpe visitante la diferencia se incrementaba poco a poco. La buena noticia era Paulo Dacosta, que exhibió descaro armando el brazo en circulación para bombardear a Saric y cerrar un 7-15 al descanso.

En la reanudación el Frigoríficos mejoró sus prestaciones ofensivas, con un Muratovic que exhibía brazo desde los nueve metros, si bien las distancias no se acortaban. El partido entraba en un intercambio de goles, con un Barcelona que esta vez sí conectaba con el gigantesco pivote polaco, que campaba a sus anchas en los seis metros. Ariño desde el extremo y Lazarov, infalible desde los siete metros, estiraban el marcador. En los locales era Rubén, también desde los siete metros, el que mantenía el electrónico, a pesar de que los de Pasqui alcanzaban su máxima renta (17-31, minuto 52).

Una exclusión de Oriol Rey permitió a los hombres de Pillo hacer un parcial de 3-0 para maquillar el marcador. Por entonces, el técnico de los de O Morrazo ya había dado minutos a un Anxo Dopazo que se gustaba, con intervenciones de mérito y con un excelente 50 por ciento de efectividad. Era el mejor punto y final a un encuentro que sirvió a los locales para recuperar sensaciones y para cerrar una etapa antes de un mes y medio próximo en el que la Copa del Rey y su excelente clasificación en Liga estarán en juego.

El entrenador del Frigoríficos, Víctor García, "Pillo", se mostró satisfecho por el papel de su equipo, "sobre todo en la segunda parte. Estuvimos bien a nivel defensivo, pero en la primera mitad perdimos 11 balones y lo raro es que no nos hicieran un parcial más contundente. Pero en la segunda atacamos mucho mejor". El técnico asume que no merecía forzar con los lesionados "viendo los tres meses que nos vienen ahora". Asegura que "ahora los partidos van por el marcador. Podemos perder, pero ya podemos competir en ellos hasta el final".

La presencia de Dopazo y Pablo Castro en pista fue valorada de forma positiva por el preparador, que apuntó que "son minutos que a ellos les servirán para madurar. Pablo es un jugador que muy pronto será importante para el club y que estuvo mejor que en Logroño". También tuvo palabras para un Salazar que "tenía un reto importante en estos duelos sin Yeray y lo ha resuelto de modo aceptable".