Ganar su tanda y, si es posible, enjugar los casi 7 segundos de diferencia que le sacó San Juan en la primera jornada. Ése es el objetivo con el que parte la Sociedad Deportiva Tirán Pereira en la segunda y definitiva jornada de la Bandera de La Concha, que se disputa esta mañana a partir de las 12.30 horas en aguas de la Bahía de San Sebastián. La tripulación moañesa saldrá con ganas de quitarse la espina del fin de semana pasado, en el que las sensaciones no fueron las mejores sobre las aguas, a pesar del sexto puesto conseguido. Y lo hará en una regata en la que mientras disputa su particular batalla por acabar quinto, en la tanda de honor Urdaibai y Hondarribia se disputarán el cetro de esta edición.

La semana ha sido positiva para un conjunto de O Con que está desde el viernes en la ciudad vasca con todos sus efectivos al completo. Nadie quiere perderse la gran cita, aunque el entrenador de los azules, José Ángel Cambados, "Truco", tiene ya prácticamente perfilado el equipo titular que disfrutará hoy de la prueba, y que en principio variará en dos o a lo sumo tres hombres con respecto al que remó el domingo anterior. "En la primera jornada competimos con el mismo equipo que había remado en Ziérbena y no salió bien. A ver si ahora con un par de cambios sale mejor", afirma.

El objetivo primero es claro, lograr el triunfo en una tanda en la que compartirá esfuerzos con La Donostiarra, San Pedro y, sobre todo, con su gran rival en la lucha por la quinta plaza, San Juan. "Queremos hacerlo bien, y si es posible sacarles más de siete segundos", señala, antes de añadir entre risas que "después ya puede venir un huracán para los de la segunda tanda".

No parece que sea así y la lucha estará dividida. En la tanda de los moañeses ellos y San Juan pugnarán por ser quintos, con el permiso de un San Pedro que aún no arroja la toalla. En la de honor el mano a mano será entre Hondarribia y Urdaibai promete ser épico, con menos de dos segundos de diferencia entre uno y otro, lo que equivale a un suspiro en una prueba de la dureza de La Concha. Orio, con una desventaja de más de 14 segundos con respecto a los dos grandes, y Kaiku, de casi 16, necesitarían poco menos que un milagro para meterse en la lucha. En buena lógica su guerra debería ser fratricida por acabar en el podio de la prestigiosa prueba, pero sin presionar en exceso a los favoritos.

Para Tirán la regata de hoy es el broche de oro a una temporada muy buena en lo deportivo, aún cuando queda un último fin de semana con dos regatas de la Liga San Miguel. Estar aquí ya es éxito, pero nadie en la expedición moañesa se conforma con eso, y el objetivo es buscar esa quinta plaza que es lo máximo a lo que se puede aspirar.