Tras semanas de preparativos el pabellón Lalín Arena se vestirá hoy de gala para acoger uno de los sectores del Campeonato de España juvenil masculino. La cita con algunas de las mejores canteras de España en diferentes categorías ya se ha convertido casi en una tradición en las últimas temporadas en la capital dezana pero cada año la misma emoción invade al Balonmán Lalín y a los aficionados del equipo rojinegro. En esta ocasión, los encargados de ilusionar a toda una comarca son los hombres dirigidos por Diogo y Pablo Cacheda. La prometedora generación juvenil del Clínica Deza tiene por delante el difícil reto de demostrar que su mezcla de calidad, juventud y sacrificio es suficiente para derrotar a dos de las mejores canteras nacionales, las de Ademar León y Granollers, además de a un Parla que llega a la cita como el gran tapado. Lalín tiene por delante tres jornadas para vibrar con el futuro y el presente de su cantera, jornadas para sentirse, una vez más y por derecho propio, entre los mejores de España.
La fiesta del balonmano lalinense dará comienzo a las 18.30 horas con el partido que enfrentará a Ademar León y Granollers. A las 20.45 entrarán en acción los rojinegros en un partido clave contra Parla. "En este tipo de competiciones el primer partido siempre es el más importante de todos", reconoció ayer un Diogo que afronta la que será su quinta fase como entrenador de la base del Balonmán Lalín (una fase con infantiles, dos con cadetes y dos con juveniles). "Todavía no conseguí nunca terminar entre los siete primeros. Estuvimos cerca con la generación de Xoán Ledo pero no lo logramos. El año pasado con los cadetes también era una buena oportunidad pero las bajas nos condicionaron. Esa es una espina que tengo clavada", reconoció el técnico.
Para Diogo, una de las claves de su éxito en esta fase estará en su defensa. "El binomio que forman nuestra portería y nuestra defensa debe ser lo que nos haga competir. Necesitamos coger sensaciones desde atrás y que a los rivales les cueste atacarnos", señaló al tiempo que reconoció no gustarle la etiqueta de 'rival más asequible' que se le ha puesto a su primer rival, el Parla. "Puede no tener el nombre de Ademar o Granollers pero será un rival muy complicado", afirmó. Los madrileños llegan a esta fase tras ser terceros en su grupo
La plantilla rojinegra
Diogo ha anunciado que ha convocado a 18 jugadores, quince juveniles y tres cadetes. Todos ellos podrán sentarse en el banquillo para utilizarse. La única baja confirmada es la de Juan, un jugador que ya el año pasado se perdió el sector cadete por una lesión y que ha tenido la misma mala suerte en esta fase juvenil.
Los tres cadetes convocados por Diogo son Javi Azurmendi, Isaac Couso y Alberto. Porteros con ficha juvenil están los porteros Rökkvi Steinunnarson, Carrón y Antón César; los juveniles de primer año Brais, Roi, Rubas, Carlos y Pablo; y los juveniles de segundo año Miguel Taboada, Mario, Cristian, Alberto, José, Simón y Murán. El técnico reconoció que es normal que los nervios hagan acto de presencia en estas categorías y ante un reto así pero considera que la fase disputada por los cadetes el año pasado fue "una experiencia" de la que todos han aprendido mucho.
En cuanto al equipo y sus cualidades, el entrenador dezano destacó la fuerza que les otorga la unión de dos generaciones con cualidades diferentes en un mismo equipo. Por un lado está la reconocida calidad de algunos de los jugadores de primer año. Por otro estaría la aportación de los de segundo año, una plantilla con una gran madurez y que ha vivido momentos duros. "Este equipo siempre ha empatizado mucho con los aficionados. Puede que parezcan débiles pero luchan a muerte y realizan un esfuerzo tremendo para estar ahí, muchas veces luchando incluso en la parte baja", afirmó Diogo con orgullo indisimulado.
Para el técnico, esa capacidad de sacrificio los convierte en una parte muy importante del equipo. "Los jugadores de segundo año pueden no tener experiencia en un sector pero son muy maduros. Tengo una confianza total en ellos porque estoy seguro de que van a dar lo que tienen que dar. Van a aportar lucha y esfuerzo. Eso te da un colchón de seguridad porque sabes que se van a partir pecho", afirmó al tiempo que reconoció que esta fase es "un premio para muchos de ellos".
Diogo considera sin embargo que el paso hacia arriba para terminar siendo campeones gallegos fue la incorporación de Rubas, jugador del Seis do Nadal y habitual de la Selección Española que fichó por el equipo al comenzar sus estudios en el Sagrado Corazón, y del portero Rökkvi Steinunnarson, en una opción de buscar un portero de futuro para el primer equipo.
