Joan Vinyes y Iago Caamaño consideran que sus dos monturas podrán ser competitivas en el XXIII Rali do Cocido Gran Premio O Mordisco que este fin de semana se disputa por carreteras de Deza y Tabeirós-Montes. El andorrano del equipo Suzuki Motor Ibérica participa en la prueba al volante de Suzuki Swift R+ después de casi dos temporadas sin correr tras lesionarse practicando el esquí. "Venimos al Cocido con la intención de probar un poco todo; en el test vimos que tanto el coche como yo estamos en forma", indicó Vinyes. El piloto de Andorra señaló que "me apetece muchísimo volver a la normalidad en un coche que puede tener mucho potencial, y creo que vamos a ser competitivos, veremos donde podemos estar". Para Vinyes correr en Galicia "da gusto porque me siento como en casa, es la mejor forma de empezar la temporada y seguro que estaré encantado este fin de semana".
Por su parte, el coruñés Iago Caamaño, piloto de la Escudería Lalín-Deza, y subcampeón gallego de ralis, llega con un Ford Fiesta R5 con el que decía ayer que "saldremos a por la victoria". Caamaño se mostró convencido de que su montura "se adaptará a las mil maravillas a los tramos de Lalín" y mostró su preferencia por "preferir correr en seco, pero dada la previsión de lluvia prefiero mojado que húmedo". Caamaño también pidió a los aficionados "que vengan preparados para presenciar una batalla como la de A Coruña y que respeten las indicaciones de la organización".
