La mala fortuna volvió ayer a cebarse con el Agrupación Estudiantil en su partido crucial frente al Sporting Sada, que se jugó en San Martiño. Los de Gelucho, que hicieron méritos sobrados para llevarse los puntos, terminaron sucumbiendo ante un solitario gol de Miguel Ángel en la primera parte, que mantiene en vilo a la afición de los de Loimil antes de la última jornada del campeonato. Certificar la permanencia fue, es y sigue siendo la principal misión de un equipo, el Estudiantil, que ayer tuvo a su merced a un Sporting Sada que apenas inquietó los dominios de Lucas.

Los primeros 45 minutos mostraron a un Estudiantil muy bien plantado sobre la hierba sintética de San Martiño, proponiendo un fútbol combinativo con una buena circulación de balón ante la que nada pudo hacer el Sada. Iker abrió la innumerable serie de ocasiones local enviando un balón por encima del larguero del portal defendido por Javier. Poco después, era Aguado el que se encargaba de estrellar un balón en el palo para desesperación de la afición celeste, que veía como todo se iba al garete en el minuto 38 cuando un balón interior que no pudo atajar Peiteado fue aprovechado por Miguel Ángel para anotar el único gol de la tarde, ayer, en San Martiño.

La segunda mitad tuvo aún más color local que la primera. Las huestes de Gelucho no dieron tregua a un Sporting Sada que apenas pudo contener las acometidas de la delantera local. Iker gozó de tres ocasiones distintas para poder igualar la contienda junto a un David Nogueira que tampoco acertó en la que tuvo delante de Javier. Para colmo de males, Colón malogró un claro penalti hecho a Iker cuando corría el minuto 75 de juego. Esta circunstancia terminó de minar la moral de un Estudiantil que hasta el final lo intentó con más corazón que cabeza. Los de Loimil llegarán a la última jornada del campeonato regular ocupando el puesto 15 de la clasificación provisional del Grupo Norte, con un punto menos que la Milagrosa y seis más que el Villestro, su más directo perseguidor.