Partido con todos los alicientes el que tendrá lugar mañana en A Lomba (17.00 horas). El Boiro se jugará ante el Arosa prácticamente su última posibilidad de recuperar opciones de pelear por las cuatro primeras plazas en una temporada que está convirtiéndose en un calvario en forma de luchas intestinas en el seno del club barbanzano.

La ventaja actual de los de Jorge Otero sobre el rival barbanzano es de seis puntos. Ello propicia la posibilidad de poder eliminar de la lucha por el play-off a un rival muy serio, pero en el equipo vilagarciano no las tienen todas consigo. Además de por la calidad de la plantilla, el comportamiento a domicilio del Boiro es para tener en cuenta. Sin ir más lejos han conseguido seis de sus trece victorias lejos de Barraña y, además, sus dos últimas alegrías fueron precisamente a domicilio en los campos del Barco y el Areas.

La calidad de jugadores como Igor de Souza, Cano, Herbert, Yahvé o Remeseiro son otras de las cuestiones a tener en cuenta en el estado de alerta del Arosa. Es precisamente esa capacidad de la plantilla boirense lo que más pesa en el estudio del rival, muy por encima del hecho de que hayan perdido cinco de los últimos siete partidos disputados.

Un hecho que también llama la atención es que sobre el césped de A Lomba se verán las caras dos equipos que le han mostrado un apego muy diferente por los empates. Tan curioso es el hecho que sobre el verde de A Lomba se medirán el equipo que más empata, el Arosa (12), con el que menos lo hace. Un Boiro que solo ha firmado tres veces tablas en 28 encuentros.

Mención aparte merece la trascendencia que tiene el partido para un equipo vilagarciano que se ha quedado a tres puntos de la cuarta plaza tras la derrota en A Magdalena. Por lo que suceda en los seis partidos que restan en A Lomba pasan muchas de las opciones de disputar el play-off.