El Kemegal Cortegada recuperó su esencia, especialmente en el último cuarto, para sumar su octava victoria del curso que le devuelve a posiciones cabeceras, concretamente a la tercera plaza.

Como se preveía el Ibaizábal plantó cara desde el primer balón. Vandell Andrade y Belén Mejías se encargaron de mantener a su equipo por delante en el marcador. Solo las pérdidas de balón impedían a las de Rubén Domínguez tener un mayor control de partido.

Las tornas cambiaron por completo en el segundo cuarto. La defensa vasca apretó las tuercas y redujo al mínimo las vías de anotación de las vilagarcianas. La ansiedad por anotar jugaba además en contra puesto que las malas decisiones en ataque iban en aumento. El parcial de ese segundo cuarto (5-15) deja a las claras las dificultades por las que atravesó un Kemegal Cortegada al que su buena defensa sirvió de red para evitar que las consecuencias fueran mayores.

Esa buena actividad en defensa se mantuvo en el juego de las locales. Además aparecieron en escena Sara Gómez y Salomé García, inéditas hasta el descanso, para aportar más soluciones a la ofensiva. Sus puntos resultaron clave para que el Cortegada se mantuviese dentro del partido con rentas mínimas, aunque siempre favorables a las visitantes. En ello tuvo que ver la aportación de Achiri Ade bajo tableros, a la postre la mejor jugadora del encuentro.

El trabajo de posesión a posesión que puso en marcha el Cortegada se mantuvo inalterable ante un rival cuyas jugadoras importantes, como Ade y Aponte, acusaron la mayor intensidad defensiva de un Cortegada que, una vez se puso por delante, ya no soltó la iniciativa en el marcador. La fiabilidad en los tiros libres en momentos puntuales ayudó a certificar una victoria muy importante ante un rival de los llamados de la misma liga.