Jorge Otero, tras ganar el año pasado este título de la Copa RFEF con el Rápido de Bouzas, vuelve a levantar la copa con el Arosa. Sobre el duelo apunto que "sus oportunidades fueron más por despistes nuestros. Sabíamos que es un equipo que llegar arriba les cuesta un poquito y estuvimos bien en el aspecto defensivo, sobre todo en la segunda parte".

Dejó claro el técnico del Arosa que está encantado con la aportación de los menos habituales y de los canteranos, el trabajo del equipo ha estado fantástic, incluso con chavales del juvenil. Contento por el resultado y por los menos habituales. Esto hace crecer el grupo y me enorgullece. Es una victoria para que los que vengan detrás vean que no es tan difícil rendir bien en el primer equipo si trabajan. Esto debe ser un motivo para trabajar más y mejor. La afición se merece esta victoria".