El Ribadumia se quedó a las puertas de la final de la Copa Diputación al quedar eliminado en las semifinales ante el Portonovo tras disparar entre ambos equipos la nada despreciable cifra de 22 penaltis en una tanda que se hizo eterna y que acabó resolviendo un juvenil del Portonovo, Cristian, al marcar el tanto definitivo. Los de Gabi Leis aspiraban a poner el broche de oro a una temporada histórica disputando la final de la Copa, pero se encontraron con un viejo conocido como es el Portonovo que supo hacerle frente a los del santiagués y, en la lotería de los penaltis, tener la suerte suficiente para llevarse el partido y ser el equipo que aspire a conseguir el título.

En encuentro resultó igualado, ya que ambos conjunto se conocen a la perfección, tanto por la proximidad geográfica como por haber jugado esta temporada en el mismo grupo de Preferente. Se adelantó en el partido el Ribadumia por mediación de Sylla, cuando el partido expiraba, lo que ponía la eliminatoria de cara para los visitantes. Sin embargo, nada más salir de los vestuarios, el Portonovo conseguía igualar el marcador por mediación de un ex de los aurinegros, Luis Alberto, muy activo durante todo el encuentro.

Desde ahí hasta el final ninguno de los dos equipos fue capaz de perforar la portería contraria, pese a que gozaron de oportunidades para ello. El empate obligó a resolver la eliminatoria desde los once metros, una tanda que acabó volviéndose eterna hasta que el juvenil Cristian consiguió poner en ventaja a los suyos.