El Mondariz sumó ayer una nueva victoria en casa, en un choque que se presumía más sencillo de lo que finalmente fue. Visitaba el campo de A Lagoa el colista, el Ribeiro, que se defendió con uñas y dientes e hizo sufrir al equipo local más de lo previsto para abrir el marcador que hasta el segundo tiempo no fue capaz de desnivelar la contienda tras un dominio más que evidente.