El beísbol vigués vuelve a verse condenado al exilio. Por tercera temporada consecutiva los dos equipos de la ciudad, el Halcones y el Trasnos, disputarán sus partidos de Primera Nacional como local en A Coruña por las deficientes condiciones que presenta el campo de As Prantas de Bembrive.

Los dos clubes están desesperados porque pasa el tiempo y siguen sin encontrar una solución a su problema. Hace tiempo la Federación tomó la decisión de que no se jugase en As Prantas por las graves deficiencias de la instalación que, entre otras cosas, ni tan siquiera cuenta con vestuarios. Los clubes rivales protestaron por esa situación y la Federación decidió entonces que no se jugase en ese campo hasta que estuviesen en condiciones dignas.

Los problemas parecían solucionarse después de que la Entidad Menor de Bembrive se comprometiese a arreglar el campo, pero finalmente esa promesa nunca llegó a hacerse realidad. El campo ha seguido muriéndose mientras los dos clubes vigueses se exiliaban en Santiago de Compostela para poder seguir compitiendo y que no les retiren las subvenciones que reciben. Los dos clubes insisten en buscar un arreglo para una situación que amenaza la supervivencia de los dos equipos que aún así militan en una categoría nacional.

Esta temporada jugarán como equipo local en A Coruña. El primer partido será precisamente el derbi que enfrentará a Trasnos y Halcones y que se disputará lejos de su ciudad. Cada jornada les costará casi mil euros a mayores por la necesidad de desplazar a sus equipos y eso les obliga a desarrollar el ingenio para incrementar sus ingresos.