La viguesa Andrea Retolaza se ha convertido en los últimos años en un referente de la biomecánica deportiva en Nueva York. Allí, como miembro de la prestigiosa escuela de Christopher Morley, entrena a promesas del tenis norteamericano.

Esta entrenadora internacional es la única española experta en esta modalidad que trabaja en Nueva York. Por sus manos han pasado, a lo largo de 2017 varios tenistas del "top 10" juvenil de los Estados Unidos; jóvenes que buscan en Andrea Retolaza los conocimientos necesarios para exprimir al máximo las posibilidades de sus cuerpos, mejorar su técnica y prevenir futuras lesiones derivadas de una mala ejecución de los movimientos.

Se trata de ámbitos muy específicos en los que Retolaza se formó, desde una edad muy temprana, en la escuela Sánchez-Casal de Barcelona, un centro de entrenamiento de alto rendimiento creado por Emilio Sánchez Vicario y Sergio Casal por el que han pasado alumnos tan destacados como Andy Murray, Svletlana Kuznetsova, Grigor Dimitrov o Daniela Hantuchova.

Hantuchova, ganadora de siete títulos WTA, entre ellos dos torneos de Indian Wells, además de haber alcanzado las semifinales del Abierto de Australia, es precisamente una de las tenistas con las que Andrea Retolaza trabaja con más frecuencia. Forma parte del equipo técnico de la jugadora checa desde hace años y con ella ha estado ya incluso en Juegos Olímpicos. Nutrición especializada, rutinas de recuperación o ejercicios compensatorios para contrarrestar la asimetría de sus músculos son algunas de las necesidades por las que la olímpica buscó asesoramiento con Andrea.

Tras un intenso año de actividad, esta viguesa ha hecho un pequeño paréntesis para disfrutar de unos días de vacaciones en Galicia, pero muy pronto volverá a los Estados Unidos para continuar con su trabajo de consultora en la Universidad de Wake Forest, en Carolina del Norte, en donde trabaja para su equipo de tenis.

A su regreso volverá a asesorar también a varios tenistas españoles en su periplo por las competiciones norteamericanas. Gente como las olímpicas Lara Arruabarrena y Arantxa Parra, que compitieron hace unos días en dobles femeninos en Wimbledon.