La Copa Vigo de fútbol aficionado arranca hoy domingo en categoría femenina, aunque en la histórica competición masculina ya lo hizo el pasado Día das Letras Galegas con el Balaídos-Peñasco (3-3) en Coia, resuelto en la tanda de penaltis (2-4). Siete equipos femeninos y diecisiete masculinos compiten en la carrera por el título más veteranos del fútbol gallego, pues data de 1933.
En Coia ya se demostró que este torneo va a ser espectacular. El hat-trick de Marcos Varela no fue inicialmente suficiente para el Peñasco, que se vio igualado por Josué Pereira al anotar el 2-3 y el 3-3 en los minutos 88 y 89. Solo los penaltis llevaron a octavos al conjunto de Andrés Perfecto.
La siguiente ronda, ya con todos los equipos en competición, se juega desde este domingo (Pereiró-San Esteban, 20:00, Monte da Mina) al día 25. El defensor del título, Gran Peña, visita Penedo da Moo y al Matamá el jueves a las 21:30.
En categoría femenina, la quinta edición promete. Dominada desde su creación por El Olivo, las de Pazó defienden título hoy (18:00 horas) en Monte da Mina (Castrelos) ante el EDVM Pereiró, de 2ª Autonómica. Pazó solo puede disponer de trece jugadoras, pues Irina y Camisón tenían compromiso con el equipo para el torneo nacional, la italiana Anaclerio ha regresado a su país y Nati está afrontando un nuevo reto en Portugal. Además de las lesionadas con que acabó la Liga. De cuartos ha quedado exento el Matamá, que entra en semifinales (31 de mayo) y es claro aspirante al título, pues ha sido el mejor equipo vigués en 2ª División.
Las finales de la Copa Vigo, masculina y femenina, están previstas el 10 de junio. La probable sede, O Vao, como en 2016, ya que es complicado el uso de Balaídos por las obras. Las semifinales, en Coia.
