Doce años después, el Rápido de Bouzas volverá a pelear por disputar, por primera vez en su centenaria historia, la Segunda División B. Los jugadores entrenados por Patxi Salinas tienen un largo recorrido por delante, con tres eliminatorias que deben solventar para lograr el ascenso. Por suerte, la segunda posición lograda en el campeonato regular le permite disputar los partidos de vuelta en el Baltasar Pujales, algo que a priori parece una importante ventaja.

Mañana domingo los aurinegros disputan el primero de los seis partidos que lo deben llevar a la categoría de bronce del fútbol nacional. Enfrente un Cayón que en las últimas seis temporadas ha disputado esta fase en cinco ocasiones, por lo que no se puede negar que es un equipo muy experimentado en estas lides. La parte positiva, para los boucenses, es que en ninguna de las cinco ha logrado el ascenso, por lo que es algo que juega a favor.

A diferencia del Rápido, el final de temporada del Cayón, en el grupo tercero de Tercera División no fue de lo más brillante, pues de las ultimas cinco jornadas disputadas, solamente logró dos victorias, ambas en su campo, y tres empates. A pesar de todo, los cántabros no conocen la derrota desde el pasado nueve de abril, cuando cayeron en Torrelaverga ante el Barreda Balompié por 3-2.

El Cayón es un equipo con una marcha en la competición muy parecida a la de los vigueses, que a lo largo de las treinta y ocho jornadas del campeonato sumaron dos victorias más, aunque también perdieron dos encuentros más que los cántabros.

En el balance goleador, las diferencias son también mínimas, con dos goles más para el cuadro de Bouzas, y seis menos para los de Santa María de Cayón.

El equipo no ha tenido muchas novedades con respecto al que la temporada pasada también logró la cuarta plaza, posición que por cierto han repetido en las últimas tres campañas. La zona en donde más se han reforzado ha sido en la medular, con Turrado, procedente del Rayo Cantabria, Javi Delgado, del Textil Escudo, Michel Secades del Lealtad y Edu Río del Tropezón. El último refuerzo fue para la punta de ataque, Chema, procedente del Selaya. El máximo goleador del equipo es Cagigas, con 10 goles, seguido de Marcos con cinco y Javi Delgado con tres.

El Cayón juega en el Fernando Astobiza, un terreno de juego relativamente nuevo, inaugurado en 1988 con una capacidad total de 2700 aficionados que, posiblemente, el domingo llenen las gradas a las 12 de la mañana.

Desde 1978, el cuadro cántabro es un fijo en la tercera división, aunque con dos lunares, entre las temporadas 2004 y 2006 y y 2007, en la que perdió la categoría y debió militar en la preferente.

La anécdota de la eliminatoria, es que los dos equipos utilizan el mismo equipaje, con camiseta aurinegra y pantalón negro. En esta ocasión será el Rápido de Bouzas quien debe cambiar de indumentaria. Un Rápido, que esta mañana inicia un desplazamiento que quieren que sea histórico.