Un gol de Saúl Ñiguez, de cabeza tras un centro de Filipe Luis en el minuto 26, dio al Atlético, finalmente, un empate ante el Leicester (1-1) y le impulsó a semifinales, otra vez entre los cuatro mejores, ronda que alcanza por tercera vez en las últimas cuatro temporadas.

El tanto Saúl le fue suficiente a los rojiblancos para despertar al Leicester City de su sueño europeo y para reservar su billete para la penúltima ronda de la mejor competición de clubes del mundo.

El conjunto entrenado por Diego Simeone, que llegaba con la renta del 1-0 de la ida logrado hace siete días en el Vicente Calderón, no se dejó sorprender por los valientes 'Foxes' y dejó la eliminatoria prácticamente encarrilada mediada la primera mitad gracias al tanto de Saúl Ñíguez (m.26).

Un gol de Vardy al poco de iniciarse el segundo tiempo (m.60) metió el miedo en el cuerpo a un Atlético que no encontró respuesta a las acometidas de los 'Foxes'.

Los hombres de Simeone controlaron bien el arranque del encuentro, presionando arriba e impidiendo la salida del rival, pero el Leicester no se sentía incómodo jugando así y recurría a los balones directos hacia Okazaki y Vardy, incansables y peleones como siempre.

En el minuto 21, el ariete japonés tuvo el 1-0 en las botas tras un centro lateral de su compañero en el ataque, pero su remate se fue por arriba ante un Oblak ya vencido.

Sin embargo, los rojiblancos, muy bien plantados, fueron los que golpearon primero. Después de un par de tímidas aproximaciones de Saúl y Carrasco llegó el 0-1, obra del propio Saúl, que en el 26 superó a Schmeichel con un perfecto cabezazo al palo largo tras un magistral centro de Filipe.

La segunda mitad fue otra historia. Shakespeare movió el banquillo e hizo dos cambios en el entretiempo: dio entrada al argentino Ulloa por Okazaki y al lateral Chilwell por el central Benalouane. El cambio del 4-4-2 a defensa de tres no tardó en dar sus frutos, y el Leicester avasalló al Atlético en unos segundos 45 minutos excelsos. Entre Oblak y los centrales intentaban frenar las acometidas inglesas, que tuvieron su recompensa en el minuto 61, cuando Vardy logró perforar la meta atlética después de una serie de rechazos en el área atlética tras un disparo de Chilwell.

Los cambios de Simeone -Lucas por Juanfran (m.56), Torres por Carrasco (m.69) y Correa en lugar de Filipe (m.74)- no mejoraron al equipo, que se limitaba a esperar atrás y buscar que Griezmann o Torres, muy aislados arriba, pescaran algún balón. Pero resistieron para volver a meterse en semifinales. Un clásico.