El Sevilla tiró de oficio para asaltar el Estadio de Gran Canaria, donde nadie había ganado esta temporada en LaLiga Santander, y venció a la UD Las Palmas con un gol en tres toques: saque de Sergio Rico, prolongación de Iborra y definición de Correa. La actuación del portero sevillista fue decisiva, no solo con sus grandes intervenciones, sino también en el inicio de la jugada que decidió el encuentro a diez minutos del final.

Las Palmas y Sevilla atesoran su mayor fortaleza en el ataque, pero no supieron sacar producto de las debilidades de las defensas en el fútbol que elaboraron. Y es que en la zaga local, además del lesionado Míchel Macedo, también faltó su mejor hombre, Pedro Bigas, por unas molestias musculares, mientras que en el Sevilla, condicionado por las bajas, Sampaoli jugó con una defensa de cuatro y con Sarabia como lateral izquierdo.

Los primeros minutos ya mostraron desajustes en ambos lados y Sergio Rico hizo una meritoria parada tras un disparo de Jesé, titular ayer. Poco después el guardameta tuvo que volver a atajar un tiro lejano del futbolista cedido por el París Saint-Germain.

En el conjunto de Sampaoli, el centro del campo estuvo impreciso, con N'Zonzi muy lento y Kranevitter condicionado por una tempranera tarjeta. Vázquez estuvo 'mudo' por la derecha, porque su equipo apenas utilizó esa banda.

La polémica llegó en dos posibles penaltis en el área andaluza. Primero con una salida de Sergio Rico en la que se llevó por delante a Prince Boateng (minuto 19), y ya terminando la primera parte, en unas posibles manos de Mercado tras un centro Jesé, jugada que continuó con un contraataque que casi finaliza en gol Ben Yedder.

Al principio de la segunda parte, Sergio Rico volvió a intervenir de forma providencial, primero en un remate de David Simón, llegando por sorpresa, y después en un cabezazo en plancha de Prince Boateng.

El partido estaba en que cualquiera de los dos equipos aprovechara un desajuste, Vitolo tuvo una gran ocasión, Halilovic pecó de individualista en la suya y disparó fuera, y Ben Yedder lo hizo a las manos de Javi Varas en un mano a mano.

Sampaoli, que sabe mucho de esto, metió a Iborra y Correa en el césped, y el gol no llegó precisamente en un desajuste: saque largo de Rico, peinada de Iborra y el argentino Correa que resuelve por bajo ante Varas. Tres toques y tres puntos. Sota, caballo y rey, sin ganar la estadística de la posesión. Eso no da puntos.