Primera cita crucial para el Amfiv en una temporada ilusionante. El cuadro vigués, tras derrotar al Amiab Albacete, principal candidato a los títulos nacionales e internacionales junto al Ilunion, visita al Bidaideak Bilbao mañana sábado. Vigueses y vizcaínos se juegan concluir la primera vuelta en la cuarta posición; en consecuencia, ser cabeza de serie en la Copa del Rey, eludiendo a los dos favoritos en cuartos de final. El entrenador del Amfiv, César Iglesias, refrenda su optimismo: "Llegamos en buena dinámica".
El Amfiv sonríe. En la pasada temporada tuvo que disputar la fase por la permanencia. Más allá del cambio de formato en la División de Honor, el equipo ha probado en estos meses su progresión competitiva. Los vigueses son cuartos, con siete victorias y tres derrotas. Acaban de derrotar al Amiab por 72-66. Los aguarda el Bilbao con seis victorias y cuatro derrotas tras caer en Ferrol por 68-66.
La cuarta plaza pesará en el sorteo de la Copa del Rey, que se disputa en Oviedo el 25 y 26 de febrero. El cuarto será cabeza de serie. Tendrá un adversario asequible en primera ronda. "En las tres últimas ocasiones que acudimos a la Copa del Rey nos tocó Ilunion en el primer emparejamiento. Y es un partido muy complicado", recuerda César Iglesias. "Está claro que acuden los ocho mejores equipos, pero puedes empezar con buena dinámica si te toca un rival más similar a tu nivel. Pero ahora jugamos con el Bilbao, con el mayor presupuesto de la competición detrás de Ilunion y Albacete. Tenemos que aprovechar que ellos se han llevado un susto en la última jornada y nosotros llegamos en buena dinámica".
Es cierto que el Bilbao no posee la plantilla profunda de madrileños y manchegos. Pero sus principales bazas no desmerecen en calidad. Turek es el máximo anotador de la liga con un promedio de 25,3 puntos; el internacional Asier García, el máximo asistente con 8,8; se les suman dos ex del Amfiv, el también medallista olímpico David Mouriz y el pívot Txema Avendaño, que este verano decidió regresar a casa tras un lustro en Vigo. Iglesias analiza a este temible rival: "El principal problema que te crean es que juegan con cuatro grandes gracias a su jugadora Chrystel Alquier, que puntúa cero. Dominan el rebote. Consiguen posiciones de tiro muy fáciles por la diferencia de altura. Tendremos que realizar un gran trabajo defensivo. Ofensivamente me preocupa menos. También podemos quitar ventajas en ataque. Pero defensivamente tendremos que estar muy concentrados para evitar que nos hagan daño".
La gesta realizada por el Amfiv ante el Amiab contenta a Iglesias, pero no dispara su euforia: "Llega un momento en que no tienes ya nada que perder. Ellos tienen más presupuesto, es un equipazo hecho para quedar campeón de Europa. Jugamos sin presión, con un extra de motivación por jugar en casa y ante un adversario de ese nivel. Nuestro equipo se está conjuntando. Los jugadores se conocen cada vez más. Podemos darle un susto a cualquiera. De ahí a repetir estas hazañas una tras otra, ojalá, pero no será fácil. Los otros también juegan".
De hecho, ganar la Copa se antoja descabellado incluso siendo cabeza de serie. El Ilunion esperaría en semifinales y el Amiab, en la final. "Es muy difícil. A un partido puedes ganarle a cualquiera. Puedes dar un número determinado de sorpresas a estos equipos, pero no de forma continua", valora Iglesias. "El Amiab tuvo en Vigo la baja de Albert Esteche, un excepcional tirador, y Harry Brown, un 2,5 menor de 23 años que puntúa 1,5. Jugamos con eso. Ganamos con un gran trabajo, pero a un Amiab que no estaba a su mejor nivel. Nosotros viajamos a Canarias la semana que viene. Shelley Cronau tiene que irse con la selección australiana. Vamos a estar mermados, tenemos la vitola de favoritos pero es el momento para que Canarias nos gane. Cada partido es diferente. Igual llegamos a la Copa del Rey y los favoritos tienen incluso más bajas. Son muchos factores".
Aunque el Amfiv se empeñe al máximo en cada cita, el gran objetivo del ejercicio es la Challenge Cup, que organiza del 27 al 30 de abril. Iglesias tiene que gestionar su plantilla, de gran calidad pero corta en efectivos, con ese condicionante: "Es el momento en que mejor estamos físicamente. No sé si es el cien por cien. La idea, dentro de la planificación, es que lleguemos al torneo europeo en el estado óptimo. Hoy por hoy ya entrenar es complicado, oponiendo quintetos igualados. Si se nos lesionasen uno o dos jugadores, tendríamos un problema muy grave".
