El francés Thomas Coville fue recibido ayer con euforia a su llegada a Brest (noroeste de Francia) después de batir el récord mundial, al completar la vuelta el mundo en vela en solitario en 49 días, 3 horas, 7 minutos y 38 segundos. La gesta de Coville, que realizó sin paradas y con un catamarán de vela multi-casco, supera el registro del francés Francis Joyon, que en 2008 tardó 57 días y 13 horas. El navegante, de 48 años, juzgó que este éxito también es fruto de lo que aprendió de sus fracasos, pues era la quinta vez que intentaba dar la vuelta al mundo.