Sergi Gómez cree tener la respuesta a las dificultades que el Celta tiene esta temporada para sacar adelante los partidos lejos de Balaídos. "No creo que hayamos cambiado algo. Ahora los rivales nos conocen y nos estudian más, saben que venimos de hacer una buena campaña. Y eso juega en contra nuestra, aunque también nos sirve para saber que no hay rival fácil y que los rivales cada vez nos esperan con más ganas", explicó.

En conferencia de prensa tras el entrenamiento celebrado a puerta cerrada en A Madroa, el defensa central barcelonés, reconoció que espera un complicado encuentro mañana en el Benito Villamarín, donde el Celta espera poner fin a una racha negativa que le persigue a domicilio desde el pasado 25 de septiembre. "Viene de una situación no muy agradable, así que tenemos que estar muy mentalizados de que va a ser un partido muy duro y complicado. Con esa mentalidad, encontraremos el camino para ganar", indicó el central, para quien el decisivo partido de la Europa League contra el Panathinaikos de la próxima semana no debe distraerles porque "ganar en la Liga también es muy importante".

El jugador barcelonés valoró, por último, su estreno goleador con el Celta en el partido copero ante el UCAM Murcia."Llevaba bastante tiempo sin marcar y hacer mi primer gol con el Celta es una ilusión. Con el Barcelona B, sino recuerdo mal, le marqué al Alcorcón y Huesca", concluyó Gómez.