Munuera Montero acabó con la paciencia del Celta. El club rompió su tradicional discreción en el asunto arbitral -algo que un sector de la afición le critica de foma recurrente- para lanzar un comunicado en el que acusa directamente al colegiado andaluz de mentir en la redacción del acta al describir la expulsión de Hugo Mallo.
Según refleja el colegiado en el escrito, el lateral marinense le dijo "eres un sinvergüenza" y que por ese motivo le mostró la tarjeta roja cuando ya se había señalado el final del partido. Añade el árbitro que Mallo se acercó en el vestuario para presentarle sus disculpas por lo que acababa de suceder.
El Celta reaccionó de forma rápida e incluso inesperada al acta. El club colgó un duro comunicado en el que avisa de que presentará alegaciones por las expulsiones de Mallo y de Sergio Alvarez -que se encontraba en el banquillo- y en el que acusa a Munuera de mentir en la redacción del acta. Según reza el escrito colgado a última hora de ayer en la web del club, el jugador no le insultó y tampoco se disculpó porque no tenía razones para ello.
Explica el Celta en el comunicado que "tras examinar el acta arbitral del partido ante el Eibar en Ipurúa, el Real Club Celta recurrirá las tarjetas rojas mostrada por el colegiado al capitán celeste Hugo Mallo una vez concluido el partido y a Sergio Álvarez en el banquillo". Hasta ahí todo bien, pero a partir de ese momento llega la carga de profundidad y la grave acusación al colegiado: "El RC Celta considera lamentable e injustificable, más allá de lo sancionado en el transcurso del partido, ya que nadie está exento de cometer errores, que en el acta no se refleje lo realmente sucedido. Hugo Mallo no llamó en ningún momento "sinvergüenza" al colegiado y mucho menos le pidió disculpas por ese hecho, tal como refleja el acta redactada por el árbitro". Se justifica el club vigués al asegurar que no pueden dejar pasar por alto "una actuación arbitral que no se ajusta a la verdad" y que por ese motivo peleará por dejar sin sanción las tarjetas mostradas a sus jugadores ayer.
Finaliza el comunicado del Celta asegurando que "dentro de los valores que propugna este club están el respeto y el buen comportamiento e igual que se lo exigimos a nuestros jugadores también debemos hacerlo con aquellos que integran este deporte. Hoy la actitud del árbitro principal no ha estado acorde con lo que el fútbol español exige".
Ahora llegará el tiempo de los recursos y presumiblemente de la denuncia del Comité de Árbitros, que siempre responde de la misma a este tipo de acusaciones. En su momento Pep Guardiola acusó "al señor Clos de mentir" (por Clos Gómez) y se ganó así una multa. Lo mismo que espera al Celta seguramente. La pelea por el recurso de las rojas será otro.
