La selección española recibe esta noche en Granada a Macedonia (20.45 horas, La 1), que en la última jornada de la fase de clasificación para el Mundial 2018 acarició la sorpresa ante Italia, con bajas de jugadores claves como Ramos, Piqué, Alba o Iniesta, y sin excesos de confianza para el último partido oficial de un 2016 que quieren cerrar en el liderato. Iago Aspas, en su primera convocatoria, esperará en el banquillo aunque sus opciones son mínimas.

Superado con nota el momento de mayor exigencia en la fase de clasificación, con dos visitas consecutivas a los rivales con los que se juega el acceso directo al Mundial -Italia y Albania- la selección española vuelve a jugar en su terreno, en un encuentro que acoge Granada, que se ha 'envenenado' por la cantidad de bajas de jugadores titulares.

A las bajas ya conocidas se sumó la de Diego Costa en la zona del nueve por fatiga muscular y un hematoma que no mejoró a tiempo. El jugador del Chelsea ha sido sustituido por Iago Aspas. Esto provoca que Julen Lopetegui de más vueltas que nunca al once por el que apostará.

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Satisfecho el nuevo seleccionador español de su arranque, levemente manchado por el triunfo que se escapó en Turín con ese empate final de Italia, pero que rápido se puso en valor goleando en Albania. Aquel día Lopetegui sorprendió arrancando el partido con defensa de tres y es su gran duda ante un rival, Macedonia, que entregará el balón y construirá un muro en su terreno.

Mantener la defensa de tres o apostar por laterales de vocación ofensiva es la principal duda por despejar de Lopetegui. En caso de jugar con tres Nacho Fernández, Marc Bartra y César Azpilicueta se perfilan como los elegidos. Si son cuatro Dani Carvajal y Nacho Monreal ocuparían las bandas.

Asumirá de nuevo Thiago Alcántara el mando del juego, escoltado por Busquets y con Koke. Y en ataque se han hecho fijos David Silva y Vitolo, con Álvaro Morata aprovechando la ausencia de Diego Costa para ser titular.

España mantiene un récord vivo, ser una de las selecciones que nunca ha perdido de local en una fase de clasificación mundialística, un total de 54 encuentros. Y su único objetivo es cerrar bien un 2016 marcado por el fracaso en la Eurocopa de Francia, eliminados en octavos de final por Italia, y el relevo del seleccionador que lo ganó todo, Del Bosque, por Lopetegui.