Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Juegos paralímpicos - Triatlón

Susana Rodríguez Gacio: "Ganar una medalla en unos Juegos tiene que ser un momentazo"

Sobre su estreno en unas Paralimpiadas: "Por fin voy a poder realizar mi sueño"

Susana Rodríguez (dcha.), durante una competición con Mabel Gallardo, su guía. // P. R. G.

Susana Rodríguez Gacio (Vigo, 1988) es, después de médica, triatleta. Lo tiene claro. Hoy está aquí y mañana, no sabe dónde. De hecho, comenzará a trabajar tan pronto acaben los Juegos Paralímpicos, a los que acudirá por primera vez. La ganadora de campeonatos del mundo y de Europa afronta con nervios e ilusión el estreno de "su" deporte en las Paralimpiadas. El próximo 3 de septiembre parte destino Río de Janeiro. Allí, le espera el sueño olímpico y... ¿una medalla?

- En 2008, a pesar de obtener el tiempo necesario, se quedó fuera de los Juegos Paralímpicos de forma injusta. Demasiado esfuerzo en vano. Ahora, Río le devuelve la oportunidad del sueño olímpico.

- Bueno, está claro que unos no sustituyen a otros porque cada año es una experiencia diferente, es un trabajo distinto el que hay detrás. Pero por fin voy a poder hacer realidad mi sueño de estar en unos Juegos, en una modalidad que me encanta, que además debuta ahora en Río. Los 60 deportistas que competimos en triatlón vamos a escribir la primera página de la historia de este deporte en las Paralimpiadas. Es un honor poder formar parte de eso. Supongo que todo pasa por alguna razón y a veces el tiempo te devuelve las cosas aunque sea de otra manera. Estoy muy contenta.

- Entonces practicaba atletismo. Pero tras un parón de dos años se propuso hacer triatlón. ¿Cuántos ha corrido ya?

- No los tengo contados. Pero suelo hacer unas 15 carreras al año entre triatlones y duatlones. Llevaré aproximadamente unas 70 en total. Empecé en 2010, lo que pasa es que ha habido unas temporadas en las que he hecho más que en otras. En esta he competido un poco menos por ejemplo.

- ¿Cómo logró adaptarse tan rápido?

- Aún no puedo decir que esté adaptada porque realmente mis condiciones fisiológicas son más para deportes de velocidad. Las carreras que he ganado en triatlón las he ganado utilizando mis características de velocista, en los últimos metros. La adaptación no fue fácil y aún creo que tengo bastante rango de mejora. Yo llevaba toda mi vida haciendo deportes más explosivos, de esfuerzos cortos? No tiene nada que ver, la mentalidad cambia totalmente. Antes un entrenamiento era hacer tres series de 150 metros, recuperando 15 minutos entre una y otra, y ahora lo máximo que recupero son dos.

- Me imagino que tiene la agenda llena de cosas que hacer.

- Llevo un año y pico, desde que acabé la carrera, dedicándome a entrenar. Suelo hacer cinco sesiones de natación a la semana, cuatro de carrera, cuatro de ciclismo y unas tres de gimnasio. Y eso lo voy combinando. Se puede traducir en unas cuatro horas diarias de entrenamiento más o menos.

- En un deporte tan exigente, para alguien con su discapacidad visual, ¿dónde están los límites?

- Es complicado depender siempre de otra persona. Así que uno de los factores más condicionantes es encontrar una guía. Encontrar a alguien de nivel, que viva cerca, para poder entrenar cada día? es difícil.

- Cambiar de guía a cuatro meses vista de los Juegos ha sido arriesgado...

- Sí, sí. Fue una decisión muy arriesgada que quizás tenía que haber tomado bastante antes, pero por unas razones u otras no fue así. Pero el que no arriesga, no gana. Después de todo lo que he entrenado con mi nueva guía, creo que pase lo que pase en Río, sea para bien o para mal, ya que todo se reduce a un día, deportivamente no va a influir, no puedo achacarle nada. Hemos practicado muchísimo y ahora mismo tenemos muy buena coordinación. Con ella he mejorado las transiciones, que era uno de mis puntos débiles. Y nadando y corriendo tiene un nivel muy bueno.

- Con Mabel Gallardo, ¿ha recuperado la ilusión?

- Sí, sí. Además, ahora mi ilusión es Río pero no se acaba ahí. Pienso en el año que viene, en Tokio? A lo mejor, hace unos meses, no te hubiera dicho esto.

- Después del cuarto puesto en el Mundial que se disputó en Rotterdam el pasado julio, ¿con qué sensaciones acude a Río?

- Quedamos cuartas, pero incluso faltaba gente favorita. No me quedé con una buena sensación porque ha sido el primer Mundial en el que me he quedado fuera del podio. Pero es una carrera de la que puedo sacar cosas muy positivas también. Fue raro, pero tampoco era el objetivo este año. Ahora, a pensar en el día 11 y ser lo mejor que pueda ser ese día, con eso estaré satisfecha.

- ¿Conoce ya el circuito?

- Sí. El año pasado estuve allí corriendo, aunque ha habido algunos cambios. Es un circuito con una natación que depende mucho de cómo esté el mar, ya que hay días que tiene auténtico oleaje y otros que parece una piscina. La bici es llana, a diferencia del triatlón olímpico que hemos visto estos días, con bastantes giros, cosa que hemos estado practicando bastante Mabel y yo este verano. La carrera es llana también.

- ¿Se muestra igual de fuerte en las tres disciplinas para septiembre?

- Los deportistas que no tienen ningún tipo de visión tienen un factor de compensación de tres minutos y cuarenta y ocho segundos que salen antes. Este componente es el mismo para todas las carreras. El de Río es un circuito especialmente rápido, que ya lo hace complicado de por sí, entonces en ese sentido el tiempo es más difícil de recuperar. Nunca se sabe. Hay que estar ahí y hacer lo mejor ese día.

- ¿Se imagina con una medalla colgada del cuello?

- No me imagino con ella ni sin ella. Una medalla en unos Juegos tiene que ser un momentazo, pero no me gusta pensar en eso y menos antes de viajar allí. Todo el mundo me lo dice, pero pienso que a veces la gente no es consciente de lo que supone ganar una medalla en un deporte paralímpico, por el nivel que hay, y más en una modalidad en la que es todo o nada. Te lo juegas todo en día. Cada carrera es diferente.

Compartir el artículo

stats