El Celta presentará este mediodía en Balaídos la campaña de abonados para la temporada 2016-17 en la que el club anunciará un incremento en el precio de los abonos de en torno a un 10 por ciento con respecto al curso precedente. La subida de precios se produce como consecuencia de la participación del equipo celeste en la próxima edición de la UEFA Europa League (UEL) y responde a la necesidad de que la creciente exigencia deportiva que tendrá que afrontar el equipo de Eduardo Berizzo la próxima temporada con tres competiciones en liza, según dijo recientemente el presidente, Carlos Mouriño.

La subida que hoy anunciará el club es con diferencia la mayor implementada por el club desde el ascenso a Primera División hace cuatro años. La política de contención de precios ha sido norma hasta ahora, con pequeñas subidas anuales que han mantenido los carnés del Celta entre los más asequibles de Primera División. Incluso con la subida que hoy se hará pública los abonos celestes estarán entre los más baratos de la categoría y seguramente serán los más asequibles de los equipos que disputen el próximo ejercicio competición continental. El club no ha detallado si los socios tendrán que pasar por taquilla para los partidos europeos -el equipo accederá directamente a la fase de grupos- o si el suplemento europeo se repercutirá en el incremento de precio, tal como sugirió recientemente el presidente celeste.

Tampoco ha adelantado el Celta si mantendrá la figura de Día del Club y si, como en temporadas anteriores, estarán exentos del pago del mismo los abonados que renueven sus carnés o se den de alta antes de un determinado plazo.

La actual campaña de abonados se va a topar en cualquier caso con el grave contratiempo de las obras de renovación de Balaídos, en concreto de la grada de Tribuna, cuya cubierta se está retirando estos días con más problemas de los que se esperaba. Al club le preocupa sobremanera que las obras de remodelación de la grada, la más cara del estadio, no estén terminadas en la fecha de inicio de la próxima liga, previsiblemente la tercera semana del próximo mes de agosto. Y los primeros retrasos que se han producido en la retirada de la cubierta de la grada no invitan precisamente al optimismo.

De no terminarse la remodelación en la fecha prevista, el Celta se vería en la obligación de reubicar a los socios de Tribuna en otras gradas de inferior categoría, con el agravante de que las gradas de Río, que ya asumieron el pasado curso a buena parte de los abonados de Preferencia, tiene ocupados casi todos sus asientos.

Las obras de la grada de Preferencia que el club afrontó por su cuenta la pasada temporada propiciaron un ligero descenso de la masa social del Celta ante la negativa de buena parte de los socios de ser reubicados en Río, de acceso más complicado para las personas de avanzada edad.

El Celta teme que las bajas que se produjeron el pasado año en Preferencia puedan repetirse éste en Tribuna por culpa de las obras de remodelación del estadio y en una temporada especialmente exigente desde el punto de vista deportivo en la que la afición tendrá que tirar del equipo.

La campaña de abonados 2016-17 será presentada este mediodía en Balaídos por la directora de marketing del club, Maruxa Magdalena.