"Al principio no me encontraba muy a gusto. Todos íbamos más lentos que todo el fin de semana y Rossi iba bastante más rápido, unas 2, 3 o 4 décimas. Se me ha escapado dos segundos, pero a mitad de carrera, cuando he empezado a recuperar con bastante facilidad, he empezado a tener problemas en dos las rectas completamente derecho; metía marchas y el neumático no dejaba de hacer spinning y no avanzaba la moto", señaló Jorge Lorenzo. "Tenía que cortar gas. Me sabe un poco mal porque teníamos una gran oportunidad de ganar la carrera. El neumático trasero me ha hecho coger un poco de miedo; he intentado reducir la velocidad para que no pasara nada extraño y coger 20 puntos. Buen resultado, porque Rossi se cayó en Austin y está detrás, pero podíamos haber arañado nueve puntos".