El Real Madrid consiguió una cómoda victoria ante el Morabanc Andorra por 107-78, en la que lo más positivo fue la reaparición de Rudy Fernández, que con 4 de 6 triples demostró estar plena y felizmente recuperado.

El regreso de Rudy Fernández en busca de sensaciones, después de tres meses y medio lesionado, y el partido en Barcelona de Euroliga de la próxima semana apenas dejaron sitio en el pensamiento madridista para el Morabanc Andorra, aparentemente un rival sin la entidad necesaria para crear muchos problemas.

Con estas premisas, y con las ausencias del mexicano Gustavo Ayón, del estadounidense KC Rivers y del senegalés Maurice Ndour, la tensión local fue escasa y el marcador campó a sus anchas ante la ausencia de defensas.

El Morabanc Andorra no dio mucha guerra y se limitó a intentar no descolgarse definitivamente en el marcador, a la espera de que el Madrid se despistara y dejara alguna puerta abierta para intentar dar la sorpresa y ganar el partido. Daniel Clark y Vojdan Stojanovski fueron los más acertados en los primeros veinte minutos de juego.

Un 9-0 de salida en el tercer cuarto, en apenas minuto y medio, (63-45) prácticamente sentenció un partido sin alma que cerró el tercer cuarto con un 83-64 y una única duda, saber la diferencia final a favor del Real Madrid. A estas alturas, la defensa del Real Madrid ni estaba ni se la esperaba. No hacía falta. Rudy demostró estar a punto y la victoria se quedó en casa.