2016 está siendo el año de John Guidetti. El delantero sueco está firmando un mes de enero de ensueño. En Liga anotó dos tantos en la victoria ante el Levante y en la Copa del Rey ha presentado su candidatura a ser el máximo goleador del torneo con los goles conseguidos en la eliminatoria frente al Cádiz y la espectacular diana que firmó en el Vicente Calderón.

El partido se acercaba a la hora de juego. El colegiado acababa de anularle un tanto al Celta obra, de nuevo, de Pablo Hernández. Guidetti había fallado previamente un mano a mano con Moyá. El sueco, uno de los que más protestó la acción que había sancionado el asistente de Mateu Lahoz, recogió de nuevo el esférico en campo contrario. El nórdico estaba sin oposición. La presión del Atlético otorgaba un respiro, incapaz de neutralizar la salida de balón de un Celta que se sentía cómodo tras la reanudación sobre el tapete del Vicente Calderón.

Lo que ocurrió desde entonces fue el principio del KO del Atlético de Madrid. Guidetti levantó la vista. Vio a Moyá adelantado. Armó la pierna derecha y envió un obús que se coló por la escuadra de la portería rojiblanca. El remate, imparable. El gol del ariete sueco permitió al Celta adelantarse de nuevo en el marcador y demostrar a la grada del Vicente Calderón que el conjunto vigués se había propuesto dar el golpe. Poco después, "Tucu" Hernández rubricó una gesta que alimenta, todavía más, el sueño del equipo de Berizzo en la competición del KO.