En el Pahíño, por segunda semana consecutiva, El Olivo inició la segunda vuelta del campeonato sumando su decimotercera victoria en fila. El líder continúa sin ceder un solo punto en la Liga 2015/16 y restó una jornada más al calendario a la espera de los cruces por el ascenso? pero sufrió por una vez y, seguramente, sin que sirva de precedente.

David Ferreiro ha tomado buena nota. El Victoria, en mitad de la tabla por una mala primera vuelta, se ha transformado. De haber perdido 0-8 en la jornada inaugural de la competición ante las viguesas a plantarles cara. En una liga de nivel decepcionante, el Victoria pisó el Pahíño con ganas de morder la yugular de las olívicas. Presión asfixiante y, sobre todo, férrea tenacidad y disciplina.

Al minuto 1 de juego las visitantes ya perdían 1-0 en acción a balón parado. Podría suponerse que en un día lluvioso, al visitante le iba a caer un buen chaparrón en forma de goles. Error. Las coruñesas mantuvieron la fe en su sistema. El partido se había descontrolado. Pero llegó el 2-0. El campeón también tenía la suerte de cara.

En condiciones normales, con esa diferencia esta temporada el adversario de turno está muerto. Pero tampoco. El Olivo, que había dejado varias titulares en el banquillo, recibió una contra para que el marcador se apretase.

No hubo cambios en la segunda mitad. Ferreiro fue dando entrada a titulares para vencer por agotamiento y Clo, en racha, sumó el 3-1 de la tranquilidad.

El Victoria acortaría distancias a punto de concluir el choque, pero los puntos ya estaban en el zurrón vigués.