El Celta ha presentado alegaciones ante el Comité de Competición contra la primera de las dos tarjetas amarillas con que David Fernández Borbalán sancionó a Pablo Hernández, el Tucu, en el partido de Liga contra el Espanyol disputado el pasado sábado en Balaídos.

El club entiende que la primera de las dos amonestaciones con que resultó expulsado el internacional chileno no es constitutiva de sanción, pues el jugador celeste pone el brazo para protegerse del choque con un adversario. El club acompaña sus alegaciones con las imágenes del partido en las que se aprecia que no existe intencionalidad del Celta en la falta al jugador perico. Si el fallo de Competición, resulta desfavorable, el club vigués ya ha anunciado su intención de presentar recurso ante el Comité de Apelación.